

Un grupo de investigadores logró revivir un gusano que permaneció congelado durante aproximadamente 46.000 años. Este hallazgo plantea interrogantes sobre los mecanismos biológicos que permiten la supervivencia en condiciones extremas y podría aportar nuevas perspectivas a la ciencia.
El estudio, dirigido por el Dr. Philipp Schiffer del Instituto de Zoología de la Universidad de Colonia, analiza cómo este organismo logró mantenerse con vida más allá de su ciclo vital habitual. La investigación plantea comprender mejor la capacidad de ciertos seres vivos para resistir ambientes hostiles.
El permafrost siberiano y sus condiciones extremas: un gusano congelado revivió luego de 46.000 años
Según Earth, el gusano fue hallado en una región de permafrost en Siberia, donde el suelo y los sedimentos permanecen congelados durante al menos dos años consecutivos. En algunas áreas, la capa congelada se extiende a cientos de metros de profundidad, lo que permite la conservación de organismos atrapados en su interior.
Las bajas temperaturas y la estabilidad del hielo han permitidopreservar restos biológicos en condiciones óptimas para su estudio. Este ambiente ha funcionado como una cápsula del tiempo natural, protegiendo material orgánico durante miles de años.

¿Cuáles son las características del permafrost?
Se mantiene congelado de forma continua por largos períodos.
Puede extenderse cientos de metros bajo la superficie.
Conserva organismos y restos biológicos en estado casi intacto.
Descubrimiento sin precedentes: un organismo con una supervivencia única
El gusano resucitado pertenece al género Panagrolaimus y es capaz de entrar en un estado de criptobiosis, un mecanismo en el que la actividad biológica se suspende casi por completo en respuesta a condiciones extremas.
El espécimen fue encontrado a unos 37 metros de profundidad, protegido por el frío extremo. Una vez descongelado en el laboratorio, retomó su actividad normal y llegó a reproducirse, demostrando que su sistema biológico seguía funcionando después de un tiempo extraordinario en inactividad.

A través de datación por radiocarbono, científicos determinaron que el gusano había permanecido en estado de animación suspendida durante decenas de miles de años.











