Los efectos negativos de la contaminación lumínica: así impacta en tu vida diaria y tu organismo

La contaminación lumínica, cada vez más presente en las grandes ciudades, no solo oculta el cielo nocturno: tiene efectos negativos, ya que afecta directamente la salud y el bienestar de las personas. 

Desde alteraciones en los ciclos de sueño hasta el aumento del estrés y el riesgo de ciertas enfermedades, la exposición constante a luces artificiales impacta de forma silenciosa en el organismo y en la vida cotidiana. 

¿Cómo impacta en tu vida diaria y tu organismo la contaminación lumínica?

Según los expertos de National Geographic, la contaminación lumínica afecta de forma profunda el funcionamiento interno del cuerpo humano y tiene consecuencias palpables en el día a día. 

Por la noche, la exposición a la luz artificial interfiere con la producción de melatonina, una hormona crucial para el sueño, producida naturalmente en condiciones de oscuridad. 

Esta hormona regula los ciclos de sueño y posee propiedades antiinflamatorias y se ha relacionado con la inhibición de ciertos tumores, por lo que su reducción implica riesgos para la salud.

Además, el impacto de la luz nocturna sobre los ritmos circadianos afecta directamente el sistema nervioso y se extiende al sistema digestivo, alterando el microbioma intestinal. 

Las células ganglionares de la retina, que responden a la luz, envían señales a nuestro cerebro que afectan desde el sueño hasta el estado de ánimo. 

Esta exposición excesiva a la luz nocturna, agravada por la falta de luz solar natural durante el día, provoca un desequilibrio que afecta tanto a quienes viven en áreas urbanas como en zonas rurales, donde las antorchas de gas y sistemas de transporte también iluminan el cielo nocturno.

Otros riesgos para la salud asociados a la contaminación lumínica

Investigaciones preliminares sugieren que vivir en zonas con altos niveles de contaminación lumínica incrementa el riesgo de desarrollar ciertas patologías. Según un estudio reciente, los efectos negativos de la contaminación lumínica son:

• Mayor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y depresión.
• Reducción en la calidad del sueño y alteración de ritmos circadianos.
• Deterioro de la calidad del esperma y mayor riesgo de partos prematuros.
• Aumento del riesgo de accidentes viales debido a deslumbramiento.
• Potencial aumento de la incidencia de ictus isquémico.