

Carlos Gomes habla claro y deja al descubierto su experiencia en la industria automotriz con cada respuesta. El número uno de PSA Peugeot Citroën en la región se refirió a los planes del grupo francés y la situación competitiva en la Argentina y Brasil con una presentación como marco: el nuevo Citroën C4 Lounge, sedán mediano que ya se fabrica en la planta de El Palomar y representa el lanzamiento industrial del año para PSA (ver nota aparte).
"Tenemos objetivos ambiciosos con el C4 Lounge. Apuntamos a que ocurra lo mismo que con Peugeot con el 308 y 408: cambiar el mix de ventas. En los últimos tres años se alcanzó un equilibrio en las ventas de todos los segmentos, más allá del B (el de los compactos). PSA está en una situación privilegiada: fuimos los únicos que invertimos masivamente en autos de media y alta gama, y nos encontramos preparados para responder a los deseos del consumidor argentino. La meta es colocar 30.000 unidades por año del C4 Lounge", dice.
z ¿Cómo se repartirá ese número entre la Argentina y Brasil?
Un 35 por ciento para la Argentina y un 65 a Brasil, aproximadamente.
z ¿Se va a exportar a otros países de la región, más allá de Brasil?
Sí, pero en casos puntuales. Brasil es el mercado esencial de exportación.
z ¿Qué proyección baraja para el mercado local en total de ventas?
Hoy tenemos una visión optimista. Además de la dinámica que existe en el sector, hay una parte del mercado argentino que es alimentada por el auto como valor de inversión. Eso cambia el perfil del mercado. Hoy trabajamos con una perspectiva de 860.000 autos, pero tal vez sea necesario retocarla hacia arriba. Tal vez estemos entre 860.000 y 900.000 autos. Pero es paso a paso. En PSA estamos pensando en un record de ventas, claramente. Hoy podemos decir que superaremos las 140.000 unidades.
z ¿Y en cuanto a producción en El Palomar?
El Palomar depende del mercado interno y las exportaciones a Brasil. En 2012 hicimos 130.000 autos y fuimos los primeros en producción. En lo que va del año la producción está estable.
z ¿En qué se diferencian las condiciones para producir hoy en la Argentina respecto de Brasil ?
Los dos mercados son diferentes y hay temas diferentes a tratar en cada uno. Pero globalmente en PSA tenemos un flujo muy equilibrado en los dos países, tanto en exportaciones como importaciones. Nuestra principal preocupación es el desarrollo de proveedores, el tema número uno de la Argentina para el sector automotor. En segundo grado, la volatilidad del tipo de cambio, la inflación y los aumentos de costos. En Brasil, la preocupación principal es de orden logístico, muy complejo, y de calidad de recursos en la región donde estamos (el estado de Río de Janeiro), que ya no es ideal desde el punto de vista de la competitividad.
z ¿Cómo influyen los niveles de inflación en el negocio?
En la Argentina los niveles de inflación son altos, que provocan cambios pesados en las condiciones de producción, a los que hay que adaptarse. Por otro lado, como nosotros tenemos una perspectiva regional, lo que hacemos acá es para exportar. Cuando la inflación acá es alta, y en otros países baja, los precios de acá no se corresponden con los de allá. El nivel de costos de la Argentina y Brasil no permite exportar a México, Chile o Perú. No alcanza hoy.
z ¿La industria local es aún competitiva para entrar a Brasil?
Los dos son no competitivos y pueden trabajar entre sí. Digamos que la Argentina es no competitiva, y Brasil también. Para medir los costos, hay que hacerlo sobre el mismo producto. El 207 Compact hecho en El Palomar y en Río de Janeiro es un 25 por ciento más caro que el fabricado en Sochaux (Francia).
// Pablo Ortega














