El estadounidense logró el primer Major de la temporada. Hubo efusivas celebraciones alrededor del green número 18 cuando Woods terminó sacando ventaja a sus compatriotas estadounidenses Dustin Johnson, Xander Schauffele y Brooks Koepka.

Una vez que logró posicionarse la punta, las esperanzas del italiano Francesco Molinari, se hundieron, porque ya se percibió la sensación de que no había quién pudiera arrebatarle la conquista.

Woods, dado de baja a menudo mientras luchaba contra problemas en los últimos años, golpeó el aire con alegría, con una amplia sonrisa en su rostro, antes de celebrar con sus hijos en el fondo del green.

"Tener a mis hijos aquí completa el círculo. Mi papá estuvo aquí en 1997 y ahora soy yo el que tienen dos niños que me ven jugar", expresó Woods.