Si bien el consumo per cápita de cereales para el desayuno aun es bajo en la Argentina en comparación a otros países de la región, el negocio sigue atrayendo a grandes grupos alimenticios locales e internacionales debido al fuerte crecimiento que evidencia año tras año.


Hasta ahora, cinco eran las empresas que se repartían una torta que anualmente nueve $ 360 millones: Pepsico con su controlada Quaker; Kellogs; Nestlé; Granix, propiedad de un grupo religioso adventista, y Granja Tres Arroyos.


Entre las cinco generan un volumen de 12.600 toneladas de cereales por año y abastecen a miles de clientes que consumen 300 gramos per cápita cada 12 meses, contra los 500 gramos de Brasil; 1,6 kilos de Chile o los 800 gramos de Perú.


Ahora, se suma Arcor que, con una inversión de $ 10 millones y un portfolio de cinco marcas, se lanzará a competir en este negocio con el objetivo de arrebatar el liderazgo que hoy ostenta Granix, con el 23% del share; seguida por Kellogs con 21%; Nestlé con 18%; Tres Arroyos con 15% y Quacker, con 9%.


Nuestra intención es convertirnos en líderes en tres años, para lo cual apostamos a duplicar el consumo per cápita actual más que a quedarnos con el market share de la competencia, sostuvo Andrés Kroyer, gerente de Negocios de Bagley, quien ayer realizó una presentación para lanzar la nueva categoría de productos. El ejecutivo agregó que las marcas a usar serán Cereal Mix, Arcor, Cíndor, Mogul y Ser con las que participará en las categorías de azucarados, copos de maíz, chocolatados y saludables.


Todos tendrán dos presentaciones de 200 a 400 gramos y sus precios oscilarán entre los $ 5 y los $ 25, como el resto del mercado. Y según Kroyer, los principales consumidores de cereales en la Argentina son los niños y sus madres en un 65%; mientras que el 35% restante lo constituyen jóvenes adultos, principalmente mujeres, que adquirieron esta costumbre por cuestiones de salud y por estética.


De hecho, en los últimos seis años el segmento de cereales creció un 45%, contra un 25% del mercado de galletitas, por lo cual Kroyer agregó que tras analizar estas cifras Arcor asumió el desafío de lanzarse en la comercialización de un producto saludable y nutritivo.


Es un mercado que seguimos desde hace varios años, que viene creciendo y que está muy ligado al de galletitas donde también participamos con algunas de estas marcas, explicó Claudio Ezcurra, gerente de Marketing de Bagley.


La estructura con la cual Arcor ingresa a este segmento es la de Bagley Latinoamérica, una sociedad con el grupo Danone, de la cual la alimenticia de la familia Pagani controla el 51% del mercado, además de tener a cargo el gerenciamiento. De hecho, Cíndor y Ser son marcas que Danone cedió bajo licencia para que Arcor las use en este nuevo nicho de negocios.


Bagley posee siete plantas en la región de las cuales cuatro están en la Argentina; es líder en galletitas en el país; el año pasado generó ventas por u$s 861 millones y 4.000 empleados.


Sin embargo el grupo cordobés no tendrá producción propia sino que su portfolio será elaborado a fazon por la empresa Kerry, de origen irlandés, que ya le provee materia prima para sus barras de cereales y cuya planta está ubicada en la localidad bonaerense de Luján.