

El Consejo Nacional de la Resistencia Iraní (NCRI, en inglés) ha informado sobre el descubrimiento de una instalación supuestamente vinculada al desarrollo de armas nucleares, cuya existencia no había sido previamente reportada. Según el grupo, este hallazgo evidencia las ambiciones atómicas de Teherán con fines militares, en un contexto de negociaciones con Washington.
La instalación nuclear, denominada 'Arco iris', está ubicada en el condado de Garmsar, en la provincia norteña de Semnan y abarca aproximadamente 1.000 hectáreas.

Revelan el propósito de la instalación militar nuclear Arco Iris
El objetivo último de este recinto sería el desarrollo de ojivas para misiles balísticos de rango intermedio, alega el NCRI.
Según el NCRI, está destinada al desarrollo de diferentes componentes de un arma nuclear y principalmente a la extracción de tritio, un isótopo que normalmente se obtiene como residuo tras un proceso de fisión y que se puede usar para potenciar el poder explosivo de una bomba nuclear y también para desarrollar bombas de hidrógeno.
'Arco iris' está equipado con radares y sistemas de defensa aérea de la Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica, lo que "indica su importancia estratégica", según el NCRI.
La agrupación, que presentó un informe el jueves que aporta fotos aéreas y análisis de imágenes satelitales del recinto, asegura que este emplazamiento opera de manera encubierta como una empresa química llamada Diba Energy Sina y que comenzó a construirse en 2009 y está operativo desde 2013.
Los datos sobre 'Arco iris' han sido obtenidos "por la red dentro de Irán del principal movimiento de oposición iraní, la Organización de los Muyahidines del Pueblo de Irán, incluyendo fuentes dentro del régimen iraní", asegura el documento.
Preocupación global por el descubrimiento de Arco Iris
El informe se publica justo antes de que Washington y Teherán se embarquen en una cuarta ronda de conversaciones sobre el programa nuclear iraní el domingo en Omán.
El análisis considera que el hallazgo "genera serias preocupaciones sobre las intenciones nucleares de Teherán y sus continuos engaños bajo pretextos civiles y comerciales".
Los ayatolás han manifestado que su interés se limita a negociar en relación con su capacidad potencial para desarrollar bombas nucleares, excluyendo cualquier discusión sobre sus capacidades para enriquecer uranio, que puede ser utilizado en centrales de uso civil.
A pesar de que algunas figuras en Washington han señalado que un futuro acuerdo debería ser más exhaustivo, el propio presidente estadounidense, Donald Trump, declaró esta semana que aún no ha tomado una decisión sobre si permitirá que Teherán continúe enriqueciendo uranio.














