

Con la implementación de la Clave Única de Registro de Población (CURP) biométrica, vigente desde marzo pasado, se inició un proceso de depuración de registros. Esto es: deberán ser dadas de baja aquellas claves que, por ejemplo, correspondan a personas fallecidas, especialmente si fueron emitidas en 2023 o años anteriores.
Así lo dio a conocer el Registro Civil de la Ciudad de México a través de su cuenta oficial en X (antes Twitter), donde hizo énfasis en la importancia de dar de baja estos registros, que de hecho, ya no se encuentran en vigencia.
Estas son las CURP que deben ser dadas de baja

El formato actualizado de la CURP incorpora datos biométricos, como fotografía y huellas dactilares. Esta nueva versión tiene como objetivo reforzar la seguridad en la identificación de personas y facilitar su uso como documento oficial en trámites gubernamentales y servicios públicos.
Ahora bien: en el caso de las personas fallecidas son sus familiares o quienes se hayan quedado con la CURP los que deben darla de baja si aún permanece activa.
Si cuentas con una CURP de una persona fallecida y su registro se generó en 2023 o antes, deberás iniciar el trámite de baja siguiendo estos pasos:
Solicita que se capturen los datos faltantes en la plataforma oficial.
Escanea el acta de defunción reciente y adjúntala en formato PDF.
Describe brevemente el dato que se debe corregir.
Envía la información al correo correccionactas.rc@cdmx.gob.mx , de lunes a viernes entre las 8:00 y las 15:00 horas.
Acude en la fecha y hora asignadas a tu cita para entregar la documentación.
Si te encuentras en una entidad federativa distinta a la Ciudad de México, puedes hacer el trámite de manera remota, siempre que adjuntes un comprobante de domicilio actualizado.
Por qué debes dar de baja estas CURP

Dar de baja las CURP de personas fallecidas que permanecen activas es primordial para garantizar la integridad de la nueva Plataforma Única de Identidad, que centralizará la información personal de ciudadanos y residentes.
Recuerda que la CURP tiene como función principal identificar a cada uno de los ciudadanos en México incluso a los residentes extranjeros que permite realizar trámites administrativos, como inscripciones escolares, servicios de salud o declaraciones fiscales.
El código alfanumérico de 18 dígitos se compone por elementos que incluyen letras y números derivados del nombre completo, la fecha de nacimiento, el sexo y la entidad federativa de nacimiento, además de otros caracteres que previenen duplicados.
Por su utilidad en la vida diaria, la CURP se ha convertido en un documento indispensable en la educación, el empleo, la salud y otros servicios públicos. La transición hacia una versión con elementos biométricos representa un paso clave en la modernización del sistema de identidad en México.













