Los pedidos de bienes durables en Estados Unidos aumentaron en julio hasta volver a los niveles observados por última vez antes de las cuarentenas por coronavirus, una señal de la creciente demanda a medida que la economía sigue recuperándose.

La Oficina del Censo reportó hoy que los nuevos pedidos de bienes durables -que incluyen electrodomésticos, coches y aviones-aumentaron un 11,2% con respecto al mes anterior hasta alcanzar los u$s 230.700 millones ajustados estacionalmente, el total más alto desde febrero, cuando los pedidos alcanzaron los u$s 246.200 millones.

Los pedidos de productos manufacturados de larga duración -diseñados para durar al menos tres años- incluso superaron las previsiones de los economistas, de un alza del 4,3%.

A partir de junio, la demanda se aceleró, cuando los pedidos de bienes durables aumentaron un 7,7%, y los pedidos siguieron en alza en cada uno de los últimos tres meses, añadieron las fuentes gubernamentales.

Según el Wall Street Journal, el alza, liderada por el equipamiento de transporte, refleja la recuperación de sectores que se cerraron durante la pandemia.

Acorde al Departamento de Comercio, los pedidos de aviones militares y vehículos a motor lideraron las ganancias, empujando los nuevos pedidos de equipamiento de transporte a un 35,6% más que el mes anterior. Excluyendo la categoría de transporte, a menudo volátil, los pedidos subieron un 2,4% más moderado.

En el inicio de la epidemia de Covid-19 en Estados Unidos, las fábricas se vieron directamente afectadas por problemas de salud de sus trabajadores interrupciones en la cadena de suministro y cierres por cuarentenas.

Pero los esfuerzos para reabrir la economía ayudaron a los fabricantes a recuperar parte del terreno perdido en marzo y abril. En julio, el empleo en la industria manufacturera se redujo menos del 6% desde el máximo alcanzado en febrero. A comparación, el empleo en las industrias proveedoras de servicios se redujo casi un 9%.