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El ataque armado ocurrido en la icónica playa Bondi de Sídney durante una celebración por el inicio de la festividad judía de Janucá evolucionó rápidamente a tragedia nacional y fue oficialmente clasificado por las autoridades australianas como un ataque terrorista.

Los hechos se desencadenaron la tarde-noche del domingo 14 de diciembre de 2025, cuando dos hombres armados abrieron fuego contra la multitud que había acudido al evento llamado “Chanukah by the Sea”. Uno de los agresores fue abatido por la policía, y el otro resultó herido y fue arrestado, indicaron fuentes oficiales.

Hasta el momento, las cifras confirmadas por agencias internacionales sitúan al menos 11 muertos y 29 heridos, entre ellos dos oficiales de policía que respondieron a la escena.

Las autoridades sanitarias trasladaron a decenas de víctimas a varios hospitales de Sídney, donde continúan recibiendo tratamiento.

La investigación preliminar descubrió objetos sospechosos cerca del área del tiroteo, que especialistas están analizando mientras se mantiene un amplio perímetro de seguridad.

El civil que enfrentó a uno de los atacantes

Algunas crónicas periodísticas y registros audiovisuales difundidos en redes sociales dieron cuenta de la intervención de un civil que logró derribar y desarmar a uno de los atacantes en medio del caos desatado tras los disparos. En uno de los videos, cuya autenticidad fue mencionada pero no validada oficialmente por las autoridades, se observó a un hombre abalanzarse sobre uno de los agresores, quitarle el arma y reducirlo en el suelo, mientras otras personas huían de la zona.

La policía de Nueva Gales del Sur no confirmó de manera formal ese episodio ni brindó detalles sobre la identidad del civil involucrado. Sin embargo, el hecho circuló ampliamente en medios australianos y fue interpretado por testigos y comentaristas como una acción decisiva que contribuyó a frenar la continuidad del ataque hasta la llegada de las fuerzas de seguridad.

El primer ministro australiano, Anthony Albanese, condenó el ataque como un claro ejemplo de violencia extremista y antisemitismo, y afirmó que el país debe afrontar y erradicar las causas subyacentes de este tipo de violencia. Líderes comunitarios judíos también expresaron su consternación y señalaron que el atentado ocurrió en un momento simbólico de celebración religiosa, intensificando el impacto emocional y social del suceso.

Terrorismo y violencia en Australia

Australia tiene una historia relativamente limitada de ataques terroristas masivos, en parte atribuida a sus estrictas leyes de control de armas y a un bajo nivel general de violencia armada. No obstante, en los últimos años se han registrado incidentes de violencia motivados por extremismos diversos, y analistas de seguridad habían advertido sobre un aumento de actos de odio y de radicalización en entornos globales sensibles desde 2023. La conflagración en Oriente Medio y tensiones geopolíticas internacionales se han traducido en episodios de antisemitismo y confrontación en varios países occidentales.

Antes de este tiroteo, los ataques terroristas dentro de Australia, aunque raros, habían incluido incidentes con arma blanca o intentos aislados de violencia política, ninguno con el alcance mortal que tuvo Bondi Beach en diciembre de 2025.

Ataques terroristas en 2025

El año 2025 registró múltiples ataques terroristas y actos letales en distintos continente:

  • Pakistán, Islamabad (11 de noviembre): un suicidio bomba causó la muerte de al menos 12 personas e hirió a otras 36 en el sector G-11 de la capital, en un ataque reivindicado por un grupo afiliado al Tehrik-e-Taliban Pakistan.
  • India, Pahalgam (22 de abril): un ataque con armas automáticas en Jammu y Cachemira dejó 26 civiles muertos, entre ellos turistas, en un incidente atribuido a Lashkar-e-Taiba y grupos aliados.
  • Pakistán, Mir Ali (28 de junio): una bomba suicida en Khyber Pakhtunkhwa causó la muerte de 17 personas en un ataque contra una columna militar, siendo uno de los episodios más letales de 2025 en la región.
  • Estados Unidos, Nueva Orleans (1 de enero): un atacante usó un vehículo para arremeter contra civiles y luego abrió fuego, dejando al menos 15 muertos y decenas de heridos en un atentado clasificado como terrorismo doméstico.

Estos episodios se producen en un contexto en el que el Global Terrorism Index 2025 señaló un aumento en los ataques y una expansión geográfica de incidentes violentos, especialmente con una prevalencia creciente de “ataques de lobo solitario” y episodios motivados por ideologías extremistas diversas.