Brasil: con nuevo 'paquete anti crimen', Bolsonaro endurece el código penal

Entre otras cosas, la ley –sancionada por el Senado dos semanas atrás– unifica la pena máxima de condena en 40 años, restringe las salidas temporales  y crea la figura del juez de garantía

El presidente Jair Bolsonaro sancionó, con vetos, una ley para endurecer el Código Penal brasileño, en línea con su política de tolerancia cero.

Entre otras cosas, la ley –que ahora deberá volver al Congreso para tratar los vetos presidenciales– extiende el tiempo máximo de condena de 30 a 40 años y elimina el beneficio de salidas temporales para aquellos acusados de cometer "delitos atroces" que provoquen la muerte.

Se trata de una versión suavizada del 'paquete anti crimen' presentado por el ministro de Justicia Sergio Moro –famoso por su rol como juez de la causa Lava Jato– que, además, incorpora las propuestas elaboradas por una comisión de juristas liderada por el juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes, y modificaciones realizadas por los legisladores para la aprobación en el Senado.

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Entre los artículos 22 artículos vetados por Bolsonaro figuran, por ejemplo, la triplicación de la pena de delitos cometidos o divulgados por Internet, y restricciones en la extracción de material genético. Así, la extracción compulsiva de ADN podría extenderse a los acusados de cometer delitos como comercio ilegal de armas, tráfico internacional de armas y organización criminal, además de acusados de crímenes dolosos practicados contra la vida, libertad sexual o crimen sexual contra vulnerable.

Por otra parte, Bolsonaro mantuvo la creación de la figura del juez de garantías, quien estará encargado de supervisar el proceso penal durante la fase de instrucción con el objetivo de asegurar la imparcialidad.

Este lunes, Bolsonaro utilizó su primer indulto navideño para beneficiar a policías y militares condenados por delitos culposos cometidos en defensa propia o sin intención, incluso cuando estuvieran fuera de servicio.

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En su primer mensaje por Navidad, Bolsonaro se definió como "un presidente que valora la familia, respeta la voluntad de su pueblo, honra a sus militares y cree en Dios" y se jactó de cerrar el 2019 "sin ninguna denuncia de corrupción".

Mientras tanto, el presidente brasileño –que el 1 de enero cumplirá su primer año de gestión– se recupera de fuerte golpe que le ocasionó una "pérdida parcial de la memoria" tras resbalarse en el baño de su casa, según confirmaron fuentes oficiales a EFE.

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