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Un estudio científico reveló una sorprendente y nueva teoría acerca del origen del beso entre las personas

Esta nueva teoría desafía las explicaciones tradicionales sobre el beso y abre un debate sobre la evolución cultural y biológica de este gesto.

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El beso, un gesto cargado de significados y emociones, tiene una historia fascinante que va más allá de lo romántico. Un estudio científico reciente publicado en Evolutionary Anthropology propone una sorprendente teoría sobre su origen, que asegura que los besos humanos podrían derivar de una antigua práctica de acicalamiento entre primates. 

Según esta investigación, los chimpancés y otros grandes simios usaban los labios para limpiar a sus compañeros, un comportamiento que, según los expertos, podría haber sido heredado por los seres humanos. 

Esta nueva perspectiva fue desarrollada por Adriano R. Lameira, psicólogo evolutivo de la Universidad de Warwick, quien dirige un laboratorio dedicado a estudiar los orígenes de las características humanas más singulares.

El origen del beso: de un ritual higiénico a un gesto de afecto

Para entender el origen del beso tal como lo conocemos, Adriano R. Lameira hizo una profunda investigación que lo llevó a descubrir varias teorías sobre cómo surgió esta práctica entre los seres humanos. 

Adriano Lameira, psicólogo evolutivo, investiga cómo la ciencia y la cultura transforman el gesto del beso. Foto: Freepik. 

Algunas teorías sugieren que los labios se desarrollaron para ser atractivos, lo que podría haber impulsado el beso, mientras que otras plantean que unir los labios fue un mecanismo para olerse y detectar compatibilidad. 

También se habla de la premasticación, un comportamiento donde los padres mastican la comida y la pasan a las crías, similar a un beso. Otra suposición apunta a la lactancia como posible origen, dado que el gesto de besar podría tener raíces en la forma en que las madres alimentan a sus hijos.

Sin embargo, Lameira fue desmontando estas teorías, ya que no explican la forma, el contexto ni la función del beso tal como se realiza hoy. Fue entonces cuando el investigador se encontró con lo que parece ser la clave: el comportamiento de acicalamiento de los grandes simios, como chimpancés y bonobos. 

A pesar de su origen higiénico, el beso se convierte en un símbolo cultural y emocional en las relaciones humanas. Foto: Pixabay. 

En este ritual, los primates usan sus labios para limpiar el pelaje de sus compañeros, retirando suciedad y parásitos en un gesto similar al beso humano. Según Lameira, esta práctica ancestral puede ser la base del beso moderno. 

La ciencia detrás del beso: un fenómeno cultural y biológico

El beso, más allá de su manifestación cultural, tiene raíces biológicas  que pueden explicar tanto su forma como su función. 

En la Argentina, como en muchas otras culturas, el beso tiene connotaciones que van desde el saludo hasta la expresión más profunda de amor y cariño. A continuación, algunos aspectos del beso que siguen siendo enigmáticos:

  • Conexión emocional: si bien la ciencia sugiere que el beso tiene un origen evolutivo, su poder para transmitir emociones y fortalecer vínculos no tiene explicación exacta.
  • El beso en distintas culturas: aunque en muchos países el beso se usa como saludo, en otros tiene un valor mucho más profundo, relacionado con la familia, el amor o la amistad.
  • El beso en la biología: aunque los humanos no seguimos realizando un acicalamiento en el sentido estricto, el beso sigue siendo una forma de comunicación no verbal que involucra procesos biológicos complejos, como la liberación de oxitocina.
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