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En medio del conflicto en Medio Oriente, el papa León XIV señaló a los mandatarios que constantemente "traicionan los deseos de paz". Además, habló sobre la "falsa propaganda del rearme" y la búsqueda de "la imposición de la ley del más fuerte".
Durante el encuentro con 400 obispos y cardenales de casi 40 países, el sumo pontífice celebró el Año Santo con el discurso más duro desde que se convirtió en la cabeza de la Iglesia católica.
Pero sus frases no se limitaron a esto, Prevost no temió a ir más allá y continuó haciendo referencia a Trump y Netanyahu sin mencionarlos.
León XIV condenó el accionar de Trump: "Traicionan los deseos de paz"
El sumo pontífice apuntó contra Trump y Netanyahu en varias ocasiones. Esto se debe a que, según él, "traicionan los deseos de paz de los pueblos con la falsa propaganda del rearme, en la vana ilusión de que la supremacía resuelve los problemas en lugar de alimentar el odio y la venganza".
Por otro lado, expresó a los miembros del clero presentes que "el corazón sangra al pensar en Ucrania, la trágica e inhumana situación de Gaza y Oriente Medio, devastado por la expansión de la guerra".
¿León XIV apuntó contra la ONU?
Prevost comunicó como "desalentador" que "la fuerza del derecho internacional y el derecho humanitario ya no parecen obligar, sustituidos por el supuesto derecho a obligar a los otros mediante la fuerza".
Las leyes, los acuerdos, los tratados, que firmaron todos estos países parecen haber quedado en la basura. "La gente ignora cada vez más la cantidad de dinero que va a parar a los bolsillos de los mercaderes de la muerte y con el que se podrían construir hospitales y escuelas. Y, en cambio, se los destruye", resaltó.

"Una vorágine irreparable": León XIV advirtió que podría ocurrir lo peor si no cesa el conflicto
El domingo pasado, el Papa habló sobre el bombardeo de Estados Unidos a Irán. Ese mismo día pidió a las partes que corten los ataques: "las guerras no resuelven nada y solo amplifican los problemas". El sumo pontífice advirtió que, si no se detiene la violencia a tiempo, puede que "se llegue a una vorágine irreparable".
"Cada miembro de la comunidad internacional tiene la responsabilidad moral de poner fin a la tragedia de la guerra, antes de que se convierta en una sima irreparable, exigió.















