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El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a sacudir el escenario internacional con una serie de declaraciones que apuntan directamente a India, Rusia y China.

Tras la reunión entre los líderes de estos tres países en Beijing, donde participaron en un desfile militar conmemorativo, Trump dio por "perdidas" las relaciones con Nueva Delhi y Moscú, y acusó a Xi Jinping de liderar una conspiración contra Washington.

Un desfile militar que encendió las alarmas

El evento en China, que conmemoró el 80.º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, reunió a figuras clave del bloque euroasiático: Vladímir Putin, Xi Jinping y Narendra Modi.

También estuvo presente el líder norcoreano Kim Jong-un, lo que elevó aún más la tensión. China aprovechó la ocasión para mostrar su poderío militar, incluyendo nuevos misiles y drones de última generación.

Trump acusa a Xi de conspirar con Putin y Kim

Desde su red social Truth Social, Trump lanzó un mensaje irónico y provocador: "Parece que hemos perdido a India y Rusia ante la China más profunda y oscura.

Que tengan un largo y próspero futuro juntos". Acompañó el texto con una imagen de los tres líderes en el desfile. Luego, acusó directamente a Xi de conspirar contra Estados Unidos junto a Putin y Kim, y pidió que le transmitieran sus "saludos" mientras planeaban en su contra.

China responde y defiende su postura

El gobierno chino no tardó en responder. A través de su portavoz Guo Jiakun, el Ministerio de Relaciones Exteriores defendió la participación de Rusia y Corea del Norte en el acto, asegurando que se trató de una iniciativa para "honrar la memoria de los mártires" y "valorar la paz".

Además, negó que el acercamiento con estos países tenga como objetivo desafiar a terceros, en clara referencia a Estados Unidos.

Putin minimiza las acusaciones y habla de buen vínculo

Por su parte, Putin se mostró relajado ante las acusaciones de Trump. En conferencia de prensa, dijo que el expresidente estadounidense tiene "sentido del humor" y que mantienen una buena relación.

Incluso aseguró que durante las reuniones en China, ningún líder hizo comentarios negativos sobre la actual administración de EE.UU., y que todos apoyaron la idea de avanzar en negociaciones de paz en Ucrania.

India, entre la diplomacia y los intereses energéticos

Aunque Trump inicialmente incluyó a India en su crítica, luego matizó sus palabras. En una rueda de prensa, afirmó que mantiene una "muy buena relación" con Modi, pero expresó su decepción por las compras de petróleo ruso.

Como represalia, Washington elevó los aranceles a productos indios hasta el 50%, lo que tensó aún más el vínculo bilateral.

La ministra de Finanzas india, Nirmala Sitharaman, anunció un paquete de medidas para apoyar a los exportadores afectados por los nuevos gravámenes. Además, dejó claro que India seguirá comprando petróleo donde le resulte más conveniente, sin importar el origen.

Guerra comercial y presión internacional

Las críticas de Trump se enmarcan en un contexto de creciente presión sobre China. Desde la Casa Blanca, se alienta a los aliados europeos a aplicar sanciones económicas contra Beijing por su apoyo indirecto a Rusia en el conflicto con Ucrania. China, sin embargo, se presenta como neutral y rechaza cualquier intento de involucrarla en la guerra.

¿Un nuevo orden mundial?

La aparición conjunta de Xi, Putin y Kim en el desfile fue interpretada por líderes occidentales como un intento de construir un bloque antioccidental.

Desde la Unión Europea, la presidenta Kaja Kallas criticó duramente el evento, lo que provocó una respuesta tajante de China, que acusó a la UE de tener "sesgos ideológicos" y de fomentar la confrontación.