

¿No te acordás lo que soñaste? La ciencia, a lo largo de los años, se enfocó brindar respuestas al misterio de los sueños, investigando su significado e impacto en la vida cotidiana.
Recientemente, el foco se centró en la habilidad de recordar los sueños y si esto tiene un impacto positivo o negativo en la salud.
Tal es así que el neurocientífico Allan Hobson reveló un dato que puede sorprender a más de uno: olvidamos el 95% de nuestros sueños. Incluso, un nuevo estudio dio a conocer por qué algunos de ellos se desaparecen de nuestra memoria, mientras que otros los recordamos.
Por qué olvidamos los sueños, según la ciencia
Andrés Barrera Medina, psiquiatra de la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que para comprender por qué recordamos algunos sueños y olvidamos otros se debe tener en cuenta que estos ocurren durante la fase de sueño MOR (movimiento ocular rápido), cuando la actividad cerebral y otras funciones corporales se intensifican mientras dormimos profundamente.
"Esta fase ocurre principalmente cuando estamos a punto de despertar, generalmente entre las 4 y las 6 de la mañana", explicó el especialista.
Si bien es cierto que también se tiene sueños fuera de la etapa MOR, recordarlos es más difícil, ya que suceden en momentos de descanso profundo. Aunque, los sueños en esta etapa suelen ser más emocionales.

¿Qué factores determinan la retención de los sueñosen la memoria? En este aspecto, Barrera Medina destacó la función del hipocampo que se activa durante el sueño e incrementa la posibilidad de almacenar y recordar los sueños al despertar.
A su vez, la amígdala tiene un papel crucial en el recuerdo de los sueños, dado que se activa durante el sueño y potencia su intensidad y vivacidad.
Por otro lado, también puede activar otras áreas del cerebro que se encuentran relacionadas con las emociones y hacer que los sueños no solo sean recordados, sino también sentir emociones intensas como el miedo.
¿Los trastornos del sueño puede influenciar en los sueños?
El especialista Barrera Medina ahondó en que los trastornos del sueño tienen un impacto en la capacidad de recordar o no los sueños. Por ejemplo, el insomnio impide que las personas puedan alcanzar la fase de sueño profundo necesaria para un buen descanso, por lo que dificulta la generación y retención de sueños.
Los medicamentos también pueden influir en la modulación de los sueños, ya que, dependiendo de sus componentes, pueden estimular la liberación de dopamina o activar las neuronas piramidales que procesan la información externa mientras dormimos.
Esto puede llevar a una mayor intensificación de los recuerdos y experiencias vividas, los cuales se reflejan en los sueños, y los hace más frecuentes.















