En esta noticia

En un mundo donde la conexión entre la salud física y mental se vuelve cada vez más evidente, la importancia de una alimentación adecuada cobra un protagonismo innegable.

En este escenario, la preocupación por la calidad de nuestra alimentación se ve acentuada por la creciente tendencia hacia alimentos y bebidas altamente procesados, que a menudo se encuentran saturados de azúcares añadidos.

El consumo de bebidas con elevados niveles de azúcares libres es vinculado con un mayor riesgo de demencia, revelan hallazgos de investigadores alemanes.

Estos alimentos abarcan desde:

  • Bebidas de frutas
  • Lácteos saborizados
  • Refrescos ricos en grasas

¿Qué significa el termino "azúcares libres"?

El término hace referencia a aquellos añadidos durante la producción de alimentos o bebidas. Los jugos de frutas, a pesar de contener azúcares naturales, también se asocian con la enfermedad cognitiva, aunque en menor medida.

Contrariamente, té y café no parecen incrementar el riesgo de demencia, según indican los expertos.

Enfermedad relacionada a la alta ingesta de azúcar

A pesar de décadas de investigación, el misterio que rodea la relación entre el aumento del consumo de azúcar y la demencia persiste.

Estudios recientes, sin embargo, sugieren que la inflamación, un factor conocido en enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, podría desempeñar un papel fundamental en este preocupante escenario.

Actualmente existen 944,000 ciudadanos británicos viviendo con demencia, una cifra que se proyecta que superará el millón para fines de la década.

La demencia, vinculada a acumulaciones de proteínas en el cerebro, como tau y amiloide, carece actualmente de cura, aunque se están evaluando tres medicamentos prometedores para frenar su progresión.

Impactante estudio de Springer Nature

En este contexto, un estudio publicado en la editorial académica germano-británica, Springer Nature, analiza las dietas de 186,622 participantes del Biobanco del Reino Unido durante hasta diez años.

En el estudio se encontró una asociación significativa entre el consumo de bebidas con azúcares y el riesgo de demencia.

  • Sorprendentemente, beber una pequeña bebida láctea diaria, como un batido de vainilla de McDonald's, se relacionó con un aumento del 39%,
  • Mientras que una lata de Coca-Cola incrementó el riesgo en un 21%.

Estos hallazgos resaltan la necesidad urgente de considerar no solo la cantidad sino también la forma en que ingerimos azúcares, ya que líquidos y sólidos parecen afectar de manera diferente el riesgo de demencia y otros problemas de salud.