

Detectar el Alzheimer, enfermedad que afecta a más de 60 millones de personas en el mundo, siempre ha sido un reto médico por la complejidad y el elevado costo de los métodos de diagnóstico convencionales.
Hasta ahora, identificar esta patología con precisión requería procedimientos invasivos como punciones lumbares o costosas tomografías PET, técnicas que resultan poco accesibles para la mayoría de los pacientes en atención primaria.

El hallazgo que podría transformar el diagnóstico del Alzheimer
Un estudio reciente en Nature Medicine marca un hito en el tratamiento de esta enfermedad. Científicos de España, Suecia e Italia crearon una prueba que detecta el Alzheimer con una simple muestra de sangre, analizando la proteína p-tau217 como biomarcador esencial.
La investigación fue liderada por instituciones reconocidas como el Hospital del Mar, el BarcelonaBeta Brain Research Center (BBRC), la Universidad Autónoma de Barcelona, la Fundación Pasqual Maragall y el Barcelona Institute of Science and Technology (BIST).
El estudio clínico incluyó a 1.767 personas con síntomas cognitivos, con una edad promedio de 73 años. La evaluación se llevó a cabo en centros especializados y en atención primaria, utilizando la plataforma automatizada Lumipulse, disponible en muchos hospitales y laboratorios.
Cribado masivo y preciso: un avance revolucionario en el diagnóstico del Alzheimer
Los resultados fueron claros: el biomarcador p-tau217 mostró una alta precisión para identificar la enfermedad, incluso en etapas tempranas. Lo más innovador de este hallazgo es que permite un cribado poblacional masivo desde consultas de atención primaria, acercando el diagnóstico a todos los sectores de la sociedad.
El doctor Eloy Rodríguez, jefe de Neurología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla-IDIVAL, subrayó la relevancia de este avance, destacando que "democratiza el diagnóstico de precisión" y elimina la necesidad de procedimientos invasivos o excesivamente costosos.
Avance en diagnóstico del Alzheimer con test de sangre
La inclusión de este test de sangre en los protocolos médicos podría materializarse en un futuro cercano, permitiendo que personas con síntomas de deterioro cognitivo obtengan rápidamente un diagnóstico preciso, asequible y sin complicaciones.
Identificar el Alzheimer en fases iniciales no solo mejora la calidad de vida de los pacientes, sino que también abre la puerta a tratamientos personalizados y a nuevas investigaciones clínicas enfocadas en frenar o ralentizar la progresión de la enfermedad.
Aunque aún se necesita la validación a gran escala y la aprobación regulatoria, este descubrimiento representa un hito en la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas y podría transformar el futuro de la salud pública a nivel global.
Con solo una muestra de sangre, estamos más cerca de cambiar el destino de millones de personas afectadas por el Alzheimer.
Detección temprana del Alzheimer: clave para tratamientos y ensayos
Detectar el Alzheimer en etapas tempranas también podría facilitar la implementación de programas de prevención y educación sobre la enfermedad, lo que permitiría a las personas adoptar estilos de vida más saludables.
La posibilidad de un diagnóstico temprano podría fomentar la investigación en terapias que apunten a modificar el curso de la enfermedad antes de que se presenten síntomas severos.












