

La Cámara de Diputados de Italia aprobó un decreto que modificará los requisitos y condiciones para acceder a laciudadanía italiana, por lo que muchos ciudadanos argentinos ya no podrán contar con este beneficio a partir de 2025.
Las nuevas disposiciones impulsadas por el Gobierno de Giorgia Meloni introdujeron cambios sustanciales al momento de otorgar o no la nacionalidad del país, para aquellas personas que sean descendientes de italianos.
Ciudadanía italiana: quiénes ya no podrán acceder a la nacionalidad
Tras la reglamentación de la Ley, el acceso a la ciudadanía italiana será por tres vías: de forma automática, según el grado de descendencia, por beneficio de Ley o por concesión. No obstante, habrá nuevos requisitos a cumplir.
¿Quiénes no podrán obtener la ciudadanía italiana?
El Gobierno italiano estableció que ya no se considerará automáticamente ciudadano italiano a quien haya nacido en el extranjero y tenga otra ciudadanía, aunque antes hubiese concedido por "derecho de sangre".
Esto afectará directamente a casos de ciudadanía directa por descendencia, adopción en minoría de edad, o matrimonio, consensuado antes de 1983.
Sin embargo, habrá excepciones: se podrán reconocer como ciudadanos italianos a quienes hayan presentado la solicitud antes del 27 de marzo de 2025 y que, previo a esa fecha, hayan sido citados e iniciado el proceso legal.
Vale destacar que, en estos casos, deberán tener un padre o abuelo que poseía exclusivamente ciudadanía italiana al momento del nacimiento o que hayan vivido dos años en el país después de haber obtenido la ciudadanía.
Adiós a la ciudadanía italiana: cómo es la nueva reforma que aprobó el Gobierno
Con 137 votos a favor y 83 en contra, la Cámara de Diputados de Italia aprobó reducir el derecho de sangre, también conocido como ius sanguinis, a únicamente hijos y nietos de ciudadanos italianos.
En las próximas horas, la medida aprobada en ambas cámaras será oficial e implementará un antes y un después en los trámites para solicitar la nacionalidad.
Anteriormente, la ciudadanía podía obtenerse sin límite generacional en la medida en que se presenten pruebas del vínculo parental. Esto incluía tanto a bisnietos como tataranietos de inmigrantes italianos.















