Una de las razones por las cuales el contado con liquidación sigue planchado es la regulación de la Comisión Nacional de Valores que le puso un cupo de $ 200 millones diarios a los extranjeros que quieran hacer CCL. Antes debían pedir permiso, se los aprobaban y podían hacerlo. Pero lo que estaban haciendo muchas compañías era usar un tercero extranjero para comprar contado con liqui y no perder acceso al MULC. "Empresas que sí tenían acceso al MULC, pero en cuentagotas, y querían comprar más dólares, buscaban una empresa extranjera a la que le cedían su crédito en pesos, y en el exterior la empresa le cedía un crédito en dólares". "Entonces, accedía a comprar dólares a un tipo de cambio de CCL más el plus que le cobraran. Había muchos comprando contado con liqui de esa manera. Porque si iban al CCL perdían acceso al MULC, y como no querían perder acceso al MULC, así este rulo", revelan en las mesas. A través del Bopreal compraban CCL, que incluso pagando una comisión del 5 o 6% a la empresa del extranjero que accedía a la maniobra, les salía más barato que el precio de mercado. "Había muchos haciéndolo, lo que originaba mucha demanda de CCL, pero con una de las regulaciones que sacaron trabaron esto", advierten los mesadineristas. El BCRA habilitó las distintas series de Bopreal para los importadores que tiene deuda con el exterior. La regulación de CNV impuso a las transferencias la misma restricción que ya regía para las ventas, porque sino, no era operativa la restricción. Incluso se subió el monto de $ 100 millones a $ 200 millones, explicaron en el regulador al ser consultados por este diario. Adriana Marinelli, especialista en mercados de capitales, aclara que ahora la única opción que quedó son las obligaciones negociables en hard dólar suscribibles en pesos para los encepados: "Por ejemplo ahora licita Edenor con relación de canje para la existente DNC20, y con tasas finales por encima del 10% en dólares". El BCRA colocó por primera vez la Serie 3 del Bopreal. Su problema es que no tiene ni las ventajas de la Serie 1 (exenta de impuesto PAÍS y útil para pagar tributos a la AFIP) ni el atractivo de la Serie 2 (de baja duration). Si valiera entre u$s 64 u$s 70 en el secundario (es decir, entre 500 y 1.000 puntos básicos menos de tasa que el AL30), el tipo de cambio implícito de comprar la Serie 3 en el primario y venderlo en el mercado sería de entre $ 1.418 y $ 1.546, muy lejos del CCL actual, por lo que colocar la Serie 3 será un desafío para el BCRA, según los analistas de la consultora 1816.