

El principal índice bursátil de Brasil, el Bovespa, volvió a derrumbarse hoy ante un movimiento global de fuga hacia activos considerados más seguros, en medio de preocupaciones sobre el riesgo político de Brasil.
El Bovespa, aunque redujo las pérdidas durante la tarde, acompañando a Wall Street, cerró con una baja de 2,32% a 45.965 puntos. En su mínimo de la jornada, el índice registró una caída de 3,5%. El volumen de operaciones de la rueda fue de 9.100 millones de reales.
“Es un movimiento de aversión total, estamos viendo una fuga de capitales de Brasil, todo el mundo procurando ir a un lugar más seguro”, dijo el analista de inversiones JoIao Luiz Piccioni, de Petra Asset en Sao Paulo.
Los inversores seguían preocupados por la perspectiva de menor estímulo monetario en Estados Unidos este año, lo que provocó una migración de fondos de los mercados emergentes hacia activos considerados más seguros.
La preocupación por la posible reducción en la liquidez del sistema financiero chino y su impacto en el ritmo de actividad en el país también pesó sobre las acciones, especialmente de la minera Vale, que tiene su principal mercado en China y cuyas acciones se hundieron casi un 6%.
El escenario local no ayudó al ambiente de negocios, en medio de la percepción del riesgo político en el país, después que manifestaciones contra el precio del transporte público y la corrupción han estremecido Brasil en las últimas semanas.













