Los bancos son reacios a recibir cash de las personas sin justificación, pese al nuevo blanqueo en efectivo del Gobierno. "Por lo pronto, los bancos con matrices en otros países tienen reglamentaciones internas y se les debe complicar evitarlas, porque en este tema hay regulaciones internacionales que difícilmente puedas no cumplir", revelan en el ambiente. Consultados en distintas entidades remarcaron que cumplen con la normativa vigente: "Siempre lo que dice la ley vigente y las normas vigentes", recalcan. "No quedó reglamentado en la norma, hay un gris, y eso ha hecho que los bancos no hayamos cambiado nuestros procedimientos. Es clave verificar de dónde viene la plata, al menos pedir un título de propiedad, porque luego desde la UIF nos piden documentación, ya que no terminan de cambiar la normativa, que no se hace por un tuit", revela un banquero. Alude a la respuesta que dio, por la red social X, el ministro de Economía, Luis Caputo, a una publicación que lo arrobaba del contador Alejandro Rosenfeld: "Vamos a hablar con los bancos. Si insisten con no acatar las normas, habrá que tomar medidas para que lo entiendan de una buena vez". El tuit decía que "los bancos no se adaptan a las nuevas normas del gobierno, siguen pidiendo certificaciones, papeles, justificaciones, como ya no pueden pedir las declaraciones juradas ya prepararon los formularios por si la querés entregar voluntariamente, con esto evitas hacer la certificación. Los Bancos, ARCA y demás organismos siguen como antes, el gobierno va para un lado y ellos para el contrario". María Eugenia Marano, ex directora de supervisión de la UIF, advierte que los bancos son de los principales sujetos obligados antes la Unidad de Información Financiera, un engranaje fundamental en la detección de operaciones y movimientos sospechosos de maniobras de lavado de activos: "Las entidades financieras locales o internacionales son uno de los eslabones claves para reinsertar el dinero ilícito en el circuito comercial formal". Para evitar su uso abusivo, el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), dentro de sus 40 recomendaciones, diseñó un sistema que prevé distintos mecanismos preventivos y que permitan la detección temprana de alertas y posibles maniobras de lavado. En tal sentido, Marano habla de un enfoque basado en riesgos, es decir, previo a un análisis se debe conocer los riesgos de las diferentes actividades medidas a través de diversos factores y de información que deben proporcionar los clientes de los sujetos obligados, en tren de monitorear operaciones y establecer perfiles. "La desregulación nunca puede significar opacidad, en este caso, si bien se eliminó la obligación de solicitar las declaraciones juradas de impuestos, se sostuvo la potestad de los bancos y otros sujetos obligados de solicitarlas y que el cliente voluntariamente las informe". "Es decir, que no existe una prohibición de pedir la información, sino que lo que se quitó es la obligación de proporcionarla. Se mantienen el resto de las obligaciones con los que debe contar un sujeto obligado, tales como un sistema de monitoreo de las operaciones bancarias", detalla.