
Rémy Cointreau, el fabricante francés de cognac, busca revivir su marca más cara inaugurando tiendas temporarias en ciudades de Estados Unidos, donde tratará de educar a los norteamericanos sobre los beneficios de comprar una botella de su lujosa bebida, Louis XIII, cuyo precio de venta es u$s 2.300.
Los consumidores consideran que esas extravagantes compras son un exceso durante la recesión, aunque datos recientes indican que ahora estarían más dispuestos a gastar en artículos de lujo.
Los ciudadanos estadounidenses se alejaron de los brillos y la ostentación durante la crisis y esta marca se vio más perjudicada que otras, comentó Augustin Depardon, que es el director de Marketing del exclusivo cognac Louis XIII de Rémy.
Rémy lanzó su primera tienda la semana pasada en el barrio Soho de Nueva York, y abrirá otros en Los ngeles y Miami a fin de este año. La compañía busca ubicaciones con gran tránsito peatonal y cercanas a otras tiendas de artículos de lujo.











