Las entidades financieras endurecen cada vez más sus controles y reportan automáticamente los datos de sus clientes a las autoridades fiscales de sus países de residencia. Esta tendencia afecta principalmente a quienes mantienen cuentas en el extranjero sin informar a Hacienda.
Según la Agencia Tributaria, los residentes fiscales en España están obligados a declarar "los bienes y derechos situados en el extranjero, cuando su valor conjunto supere los 50.000 euros, mediante el Modelo 720, con el fin de garantizar la transparencia fiscal y el cumplimiento de las obligaciones tributarias".
Esta obligación se enmarca dentro de los controles más estrictos que aplican tanto bancos como autoridades fiscales para evitar la ocultación de activos fuera del país.
¿Es posible que cierren tu cuenta bancaria en dólares sin aviso previo?
Aunque muchas personas sostienen que poseer una cuenta en dólares en el extranjero les proporciona una mayor privacidad financiera, la realidad es que los bancos están obligados a adherirse a normativas internacionales de transparencia.
Si eres ciudadano europeo y no declaras los ingresos vinculados a esa cuenta, la entidad financiera puede interpretarlo como un riesgo legal o reputacional y optar por cerrarla. El incumplimiento de las normativas fiscales, la falta de documentación adecuada o la identificación de movimientos sospechosos pueden ser razones suficientes para tal acción.
Aunque una cuenta esté denominaba en dólares, lo que realmente importa es si el titular ha cumplido con las obligaciones fiscales de su país. En España, el incumplimiento puede resultar en sanciones severas, tales como multas por no presentar el Modelo 720 o por ocultar ingresos en la declaración del IRPF.
Consecuencias de no declarar una cuenta en dólares en el extranjero para ciudadanos europeos
En la actualidad, los bancos están obligados a cumplir con estrictas normativas contra el lavado de dinero y deben verificar tanto la identidad de sus clientes como el origen de sus fondos. La falta de transparencia o la negativa a presentar documentación puede activar alertas internas y derivar en el cierre unilateral de la cuenta por parte del banco.
De este modo, omitir la declaración de una cuenta bancaria en dólares en el extranjero puede acarrear serias consecuencias legales. En países como España, por ejemplo, la Agencia Tributaria exige que cualquier cuenta fuera del país que supere el equivalente a los 50.000 euros, sea informada mediante el Modelo 720.
No hacerlo puede conllevar sanciones económicas que, en algunos casos, superan el saldo no declarado. Además, los rendimientos generados por esa cuenta deben tributar en la declaración del IRPF.
Las autoridades consideran que no declarar estos activos implica una voluntad de ocultación que puede derivar en inspecciones fiscales o procesos judiciales.
Cómo evitar el cierre de tu cuenta en dólares
Para conservar activa una cuenta bancaria en dólares siendo ciudadano europeo, es esencial cumplir con las exigencias fiscales tanto del país de residencia como del país donde se encuentra la cuenta. Esto implica presentar la documentación requerida por el banco (como los formularios fiscales CRS o FATCA), justificar el origen legítimo de los fondos y declarar todos los ingresos generados.
Además, es recomendable mantener actualizados los datos personales y fiscales ante la entidad financiera. En un contexto donde los controles bancarios son cada vez más rigurosos, contar con el asesoramiento de un especialista tributario puede prevenir complicaciones futuras y asegurar que tus operaciones se realicen dentro del marco legal.