Los 2 hábitos diarios que ayudan a mejorar la calidad del sueño para tener un descanso reparador, según expertos
Directamente ligados con la alimentación, estos dos hábitos permiten que con simples modificaciones de la rutina se logre un sueño reparador.
Lograr un descanso reparador no siempre es sencillo, pero para fortuna de aquellas personas que tienen problemas para alcanzar esa meta existen 2 hábitos diarios que, según expertos, ayudan a mejorar la calidad del sueño de forma efectiva.
Estos hábitos saludables, o para ser más precisos modificaciones de conducta, son una buena herramienta para prevenir el insomnio y están relacionados con la alimentación, otro aspecto fundamental para el buen funcionamiento del organismo.
¿Cuáles son los 2 hábitos diarios que mejoran la calidad del sueño según los expertos?
En el libro "Dime qué comes y te diré cómo duermes", escrito por el Dr. Antoni Esteve en conjunto con la Fundación Alícia, se hace hincapié en 2 aspectos a corregir para lograr un sueño de calidad por las noches con el objetivo de convertirlos en hábitos de conducta.
La primera recomendación es tener un horario fijo para comer, de manera tal que se pueda consolidar el reloj biológico interno. Dicho de otra manera, si el cuerpo se acostumbra a alimentarse regularmente en un mismo momento del día, se predispondrá mejor para dormir.
Asimismo, esto garantiza un mejor funcionamiento del cuerpo, con una mayor aceleración del metabolismo y niveles de energía altos para poder desarrollar todas las tareas diarias de la mejor manera.
El segundo hábito, igualmente importante, consiste en no ingerir alimentos al menos 2 horas antes de acostarse. ya que durante ese lapso de tiempo el proceso digestivo se puede completar sin inconvenientes y de manera efectiva.
¿Cómo reforzar estos hábitos saludables para mejorar la calidad del sueño?
En el mismo libro los expertos se explayan sobre cómo reforzar los mencionados hábitos saludables, todo con el fin de dar una solución a quienes padecen problemas de insomnio regularmente.
Siguiendo los lineamientos antes planteados, cenar liviano es una buena forma de evitar problemas para dormir. Al mismo tiempo, hacer actividad física simple como caminar o trotar unos minutos cada día es un gran aporte para el bienestar general del cuerpo y la mente.