La fruta que mejora la digestión, combate la anemia, cuida tu piel y fortalece el sistema inmunológico
Descubre qué ventajas existen al incluir esta comida en tus platos, las patologías que contribuye a evitar y las restricciones de su ingesta, según los expertos.
En su página web oficial, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda mantener una alimentación saludable para prevenir enfermedades no transmisibles, como la diabetes o problemas cardiovasculares y mejorar el desarrollo cognitivo.
Por esa razón, los expertos en nutrición aconsejan incorporar a la dieta diaria alimentos que aporten las vitaminas, minerales y nutrientes necesarios para la buena conservación del organismo, como la fresa.
¿Qué es y para qué sirve la fresa?
El fresal, también conocido como fragaria, es una planta que se encuentra de manera silvestre en diversas regiones del mundo, especialmente en Asia, África y Europa. Esta especie se adapta mejor a terrenos ricos en nutrientes, bien drenados y húmedos, lo que le permite prosperar en ambientes frescos y boscosos. Su presencia en el hemisferio Norte es notable, donde se pueden observar diferentes variedades.
Con una altura que alcanza los 20 cm, el fresal se caracteriza por sus hojas ovales y denticuladas, que crecen en grupos de tres. Durante la primavera, entre abril y junio, la planta florece, mostrando flores blancas en los extremos de los tallos desnudos. Estas flores son el preludio de los frutos que vendrán, añadiendo un toque de belleza al paisaje natural.
Los frutos del fresal, conocidos popularmente como fresas, son el resultado del engrosamiento del receptáculo floral. Su forma cónica y su vibrante color rojo escarlata los hacen irresistibles. Al madurar, las fresas emanan una fragancia dulce y su sabor es inconfundiblemente delicioso, convirtiéndolas en una de las frutas más apreciadas en todo el mundo.
¿Cuáles son los beneficios de consumir la fresa?
Las fresas son una fruta rica en propiedades beneficiosas para la salud, destacándose por su capacidad astringente y diurética. Su decocción puede servir como un excelente sustituto del café, ofreciendo una alternativa más saludable. Gracias a su alto contenido de taninos, las fresas son eficaces en el control de la diarrea y se utilizan en tratamientos para la anemia y problemas hepáticos. Además, su combinación con otras hierbas como la corteza de sauce y el hinojo puede estimular el apetito, lo que las convierte en un aliado en la mejora de la digestión.
Asimismo, el consumo de fresas, junto con otras frutas como el limón y las moras, puede ser beneficioso para mitigar los síntomas de la menopausia. Históricamente, las hojas de fresa y menta se han utilizado por sus propiedades antisépticas, lo que resalta su versatilidad en el cuidado de la salud. Para el cuidado de la piel, una mezcla de fresas, miel y crema de leche se recomienda para mantener el cutis limpio y saludable, evidenciando así que las fresas no solo son deliciosas, sino también un recurso valioso para el bienestar general.
¿Cómo incorporar fresa en las comidas?
La fresa se puede incorporar fácilmente en las comidas diarias al añadirla a los desayunos, como en yogures, batidos o avena, aportando un toque dulce y fresco. También se puede utilizar en ensaladas, combinándola con espinacas y nueces para un plato nutritivo. Además, las fresas son ideales para postres, ya sea en tartas, helados o simplemente con un poco de chocolate. Su versatilidad las convierte en un ingrediente delicioso y saludable para cualquier comida.
Comparte tus comentarios