Adiós a todas las pensiones en 2025: este es el motivo por el que pueden dejar de pagarte ya
Para solicitar una pensión no contributiva, no es necesario haber cotizado a la Seguridad Social, pero sí cumplir con ciertos requisitos.
Las pensiones no contributivas en España garantizan un ingreso mínimo a personas que no han cotizado lo suficiente en la Seguridad Social y se encuentran en una situación económica vulnerable. Sin embargo, el incumplimiento de ciertos requisitos puede llevar a la suspensión o pérdida definitiva de este beneficio a partir de 2025.
La Seguridad Social exige a los beneficiarios cumplir con criterios de residencia, edad y, sobre todo, de ingresos. Si se superan los límites económicos establecidos, el derecho a la pensión se extingue. Además, la falta de actualización de la información personal o la omisión en la presentación de documentos obligatorios también pueden afectar el cobro.
Requisitos para acceder y mantener una pensión no contributiva
Las pensiones no contributivas se dividen en dos categorías: jubilación e invalidez.
Para acceder a la pensión no contributiva de jubilación, se exige:
Tener 65 años o más.
Acreditar residencia en España por al menos 10 años, de los cuales dos deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud.
No superar el umbral de ingresos fijado por la ley.
En el caso de la pensión no contributiva de invalidez, los requisitos son:
Tener entre 18 y 64 años.
Haber residido en España al menos 5 años, con dos consecutivos antes de la solicitud.
Presentar un grado de discapacidad del 65% o más.
No sobrepasar el límite de ingresos estipulado.
¿Cuánto se puede ganar sin perder la pensión?
El límite de ingresos para mantener la pensión en 2025 se ha fijado en 7250,60 euros anuales. Cualquier ingreso adicional, ya sea por trabajo, ayudas o rentas, se sumará al cómputo total y, si se supera el umbral, la pensión podría ser suspendida o eliminada.
En casos donde los ingresos superen el límite, pero de manera puntual, la pensión puede reducirse proporcionalmente en lugar de ser cancelada por completo.
Obligaciones para no perder la pensión en 2025
Para evitar la suspensión del pago, los beneficiarios deben cumplir con ciertos trámites:
Declaración anual de ingresos: Hasta el 31 de marzo, cada pensionista debe informar sobre sus ingresos del año anterior. Si no lo hace, la Seguridad Social puede suspender el pago hasta que regularice su situación.
Certificado de fe de vida: Este documento debe presentarse en el primer trimestre del año. La falta de presentación puede derivar en la suspensión temporal de la pensión.
Actualización de datos personales: Cualquier cambio en la dirección, estado civil o situación económica debe ser informado al IMSERSO en un plazo máximo de 30 días. No notificar estos cambios puede afectar el derecho a la prestación.