

En esta noticia
En el marco de la escalada de la violencia narco en Rosario, el gobernador de Santa Fe, Maximiliamo Pullaro, fue otra vez amenazado de muerte a través de una nota dirigida a él encontrada en la calle.
La semana pasada, los asesinatos de inocentes llevados a cabo por diversas bandas de narcotraficantes en la ciudad de Rosario se intensificaron como un mensaje directo a la nueva gestión provincial. Por este motivo se reforzó los controles en las cárceles, para dificultar el contacto entre los líderes que se encuentran presos y el exterior.
Violencia narco en Rosario: qué dice la nueva amenaza contra Pullaro
Tras los cuatro asesinatos a víctimas inocentes de la semana pasada, dos de ellos acompañados por notas amenazantes, este martes apareció una nueva carta que lee: "Hasta que Pullaro no pare, vamos a matar. El que avisa no traiciona".
El escrito, igual que los que aparecieron con los crímenes del colectivero Marcos Caiola y el playero de estación de servicio Bruno Bussanich, está firmado por "zona norte, sur, oste", lo que hace sospechar a las autoridades de un nuevo acuerdo entre las distintas bandas narco que dominan la ciudad, las cuales hasta la llegada de Pullaro solían estar enfrentadas.

Sin embargo, también se puede leer esta "firma" como una advertencia de los próximos lugares donde los narcos podrían atacar inocentes, otra posibilidad que se baraja.
La nota apareció frente a la casa de una mujer sin conexión aparente con la mafia en la zona norte de Rosario, en Cayetano Silva al 1200, a poca distancia del policlínico PAMI 2.

Se trata de una "advertencia" más de los narcos luego de que Pullaro, quien asumió en Santa Fe a fines del año pasado, reforzara los controles en las cárceles y comenzara a investigar irregularidades en estas que permiten a los líderes y rangos medios presos comunicarse con el exterior y organizar desde allí sus crímenes.
Violencia narco en Rosario: qué decidió el gobierno de Milei
Con la ola de asesinatos de la semana pasada, el Gobierno Nacional definió el envío de efectivos de Gendarmería a Rosario, donde también se encuentra la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien este lunes anunció un plan "anti mafia".

"Esta guerra no es por territorio, es contra Pullaro y (el ministro de seguridad santafesino, Pablo) Cococcioni. Queremos nuestros derechos, esto para todos los presos", expresaba la nota que dejaron los sicarios que asesinaron a Bussanich, la cual remarca la exigencia de las bandas narco por mantener las condiciones previas de los presos.
En este contexto, tal como adelantó El Cronista, el Gobierno analiza adecuar la normativa de Defensa vigente para que las Fuerzas Armadas puedan actuar de manera directa en la lucha contra lo que el presidente Javier Mileidenomina un avance del "narcoterrorismo" en la Argentina.
Bajo la orden estricta del Presidente, tanto el ministro de Defensa, Luis Petri, como Bullrich evalúan cómo modificar la reglamentación de las leyes de Defensa y la de Seguridad Interior para que se pueda accionar sobre "organizaciones narcoterroristas con sustento externo".
Así, los militares no sólo podrían ejecutar un apoyo logístico a las fuerzas de seguridad federales como hicieron ahora en Rosario, sino que tendrían capacidad de acción en el terreno copado por grupos de narcos.













