En esta noticia

La denuncia acerca de un supuesto complot policial que había realizado el gobierno de Axel Kicillof, que apunta indirectamente al candidato libertario y excomisario Maximiliano Bondarenko, continúa siendo investigada y, según fuentes provinciales, fue ampliada en las últimas horas con dos nuevos aportes que podrían generar nuevas causas.

El caso cobró notoriedad durante la última semana de julio y se había iniciado luego de que Asuntos Internos recibiera una denuncia anónima que daba cuenta de la confabulación de unos 24 policías que habían conformado un grupo en el que -entre otras cosas- elaboraban informes de seguridad para alimentar la campaña libertaria de Bondarenko. Además, el ministerio de Seguridad provincial, Javier Alonso, anunció que cesanteaba de manera inmediata a 24 efectivos y presentó una denuncia ante la Justicia.

La causa fue respondida por la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, quien -en una primera reacción- aseguró que se trató de una maniobra de "espionaje" contra una acción privada de un grupo de personas. Más tarde, en duros términos contra Kicillof, dijo que la denuncia había sido "tirada abajo" por la Justicia y pidió la reincorporación de los efectivos.

Ese punto fue desmentido desde La Plata: "Sigue profundizándose la investigación, hoy (por ayer) comenzaron a tomarle declaratoria a los implicados, a los 27. Hay 25 cesanteados y viene una investigación. Lo que dijo la ministra Bullrich es fake total", señaló una fuente de alto rango en declaraciones a El Cronista.

Desde la Provincia aclaran que en el ámbito judicial no hubo "ningún cambio en ninguna carátula" ni tampoco un cierre de la investigación".

"En ningún caso se ha expedido la justicia, para nada. (El fiscal Alvaro) Garganta, que es el que subroga porque Juan Cruz Condomi está de vacaciones, dijo que no va a hacer nada hasta que vuelva su par".

Mientras tanto, los policías empezaron ayer a dar testimonio y descargo en Asuntos Internos y lo obrado, siempre según la posición oficial, sigue creciendo a partir de nuevas denuncias que podrían derivar en nuevas resoluciones.

La situación permitió una presentación en sociedad para Bondarenko, un candidato de poco "conocimiento" para los votantes. Sin embargo, desde la Provincia señalan que no hubo una especulación política para evitar darle protagonismo y se hizo la presentación tal como corresponde: "Las cosas que se encontraron, la Justicia dirá, pero no eran compatibles con sus funciones. Y algunas cosas eran graves y atentaban contra el funcionamiento de la Fuerza", aclararon a este diario fuentes cercanas al Gobernador.

Por su parte, Bullrich se expresó sobre el tema por última vez a comienzos de agosto cuando afirmó estar "en desacuerdo" con que la Policía "haga política", pero que en este caso se trató de una decisión "desleal" de la Provincia.

"Los agentes de la Policía de PBA están protegidos por nuestra Constitución nacional, que dice que, si estás en una acción privada, estás fuera de la mirada de los magistrados. Cuando haces una acción privada el espionaje es una mala forma de intentar generar una denuncia penal", señaló.

"Estoy en desacuerdo con que la policía haga política, no puede aparecer en un acto público o firmando una solicitada de apoyo a un candidato. En este caso, lo que hace el Gobierno es exagerar esto para entrar en un choque para tratar de debilitar al candidato (Maximiliano) Bondarenko que, más que debilitarlo, lo fortalece porque lo hace quedar bien delante de sus camaradas", indicó.

Además, la funcionaria manifestó: "Haber comenzado una campaña en PBA echando policías no va, es muy desleal". Por ahora, sin embargo, no se avanzó con un intento para dar nuevo trabajo a los policías cesanteados dentro de organismos nacionales por cuestiones de índole jurídica.

El debate de fondo: la inseguridad

En las filas de Fuerza Patria se manifiestan persuadidos de que la intención de la campaña libertaria será insistir con la inseguridad bonaerense y que recrudecerán esos discursos a través de los medios en una intención de "provincializar el debate".

En ese sentido, Facundo Tignanelli -candidato por la Tercera Sección electoral y mano derecha de Máximo Kirchner- dijo que el oficialismo nacional se apoya en el discurso de la inseguridad para hacer su campaña: "Da una sensación de que poner el uniforme da idea de seguridad, pero los trabajadores y trabajadores de la Policía saben que los hacen poner la cara y luego les sueltan la mano".

El trasfondo, sin embargo, incluye un capítulo por los fondos públicos ya que la provincia reclama al gobierno de Javier Milei que le devuelva lo que se le había derivado durante la administración de Alberto Fernández en medio de una discusión que se inició en septiembre de 2020, durante una revuelta policial que cercó la Quinta de Olivos.

Fernández, ante ese contexto, decidió redirigir fondos que habían sido otorgados por decreto de Mauricio Macri a la Ciudad de Buenos Aires para crear su propia Policía. Esa decisión rompió la relación que mantenían el mandatario y el por entonces jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.

Si bien el Congreso sancionó una ley para dirimir el reparto de esos fondos, la cuestión se judicializó y la Corte Suprema decidió en favor de la Ciudad. La administración de Milei le retiró los fondos a Kicillof. Desde la gobernación afirman que, en esa acción, la Nación le robó "10 mil patrulleros".