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Miguel Angel Pichetto no se fue de vacaciones ni se toma un día de descanso. Dedica cada hora de su vida a la política, una pasión que lo domina aún en medio de una de las crisis más grandes que le tocó vivir, que lo tienen especialmente preocupado porque "Argentina se debate entre un neocomunismo y el pobrismo católico".
Y como "no me ando protegiendo ni escondido", según advierte, Pichetto le dice a El Cronista lo que muchos dirigentes piensan y no se animan a expresar: "el ciclo (de Alberto Fernández) está cumplido, la señora va a tener que hacerse cargo, aunque no quiera, porque si no la crisis se la va a llevar puesta a ella". Está seguro de que eso va a suceder porque "Cristina tiene una gran resiliencia y está llegando a la conclusión de que si no se pone al frente del Gobierno, va a salir tercera en las elecciones".
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Mientras analiza con crudeza la realidad y anticipa que está dispuesto a dar el debate con eje en que "la Iglesia Católica en nuestro país es parte del problema", el ex senador y actual Auditor General de la Nación diseña el crecimiento del Encuentro Republicano Federal (ERF), el partido que ya tiene inscripción nacional y que forma parte de Juntos por el Cambio.
Con peronistas
El 3 de agosto, por ejemplo, viajará a Rosario a presentar en la Fundación Libertad Capitalismo o pobrismo. el libro que escribió con el periodista Carlos Reymundo Roberts. Allí piensa tomar contacto con peronistas críticos del Frente de Todos, con ganas de pegar el salto a JxC. Cuenta que en Santa Fe, el partido que armó ya tiene tiene su primer bloque legislativo en el país integrado por la diputada provincial Betina Inés Florito.
De Rosario partirá a Corrientes, donde también presentará el libro y verá las alianzas que fue tejiendo Rodolfo Martínez Llano, un peronista muy crítico de del kirchnerismo y La Cámpora, cada vez más cerca de Encuentro Republicano en esa provincia.
Con liberales
Pichetto notó que hicieron ruido algunas reuniones que gente de su equipo viene teniendo con sectores vinculados a Javier Milei o José Luis Espert. "Es estúpido agredir a los liberales, porque tienen algunas ideas parecidas a nosotros y representan a un electorado que quiere transformar la Argentina y bien podrían votar por los candidatos de Juntos por el Cambio", dice.
"Yo me reuní con Milei el año pasado, pero nunca le pedí que entre en nuestra coalición ni creo que a él le interese. Y si hay gente de mi espacio que le interesa reunirse con ellos, están en su derecho, en muchos casos se trata de relaciones de amistad. Hablar hay que hablar siempre con todos", sintetiza.
Su preocupación es por dónde va a transitar el Gobierno hasta que haya elecciones. Lo demás, asegura, son temas menores.