Solución “facilista u oportunista". Así calificó la ministra de Industria, Débora Giorgi, la conciliación obligatoria dictada por el ministerio de Trabajo bonaerense en el conflicto de la planta autopartista Gestamp, en declaraciones realizadas esta mañana a radio Nacional Rock.

Además, criticó el accionar tardío del Gobierno provincial y aseguró que "el conflicto comenzó hace más de 50 días".

De esta manera, la ministra de Industria se sumó a las críticas presidenciales contra el gobernador bonaerense. La presidenta Cristina Fernández dijo ayer, en relación al conflicto, que “no se puede estar solo para sonreir en la foto”, en obvia alusión a una presunta falta de decisión del gobernador sobre ese tema.

La jefa de estado realizó esas declaraciones durante un acto oficial en Río Gallegos, en el que no se refirió a la situación de su vice Amado Boudou, pero pidió al gobierno provincial "que resuelva" la toma de la compañía que paralizó la actividad.


"Si vas a dictar la conciliación obligatoria dictámela hace 55 días y no 55 días donde tuve que esperar a tener prácticamente 5 terminales paradas poniendo en un a situación no merecidas a 80 mil familias de la cadena automotriz", enfatizó la ministra de Industria, Débora Giorgi, y agregó que "una conciliación obligatoria sabiendo esta situación de indefensión del grueso de los trabajadores", dijo Georgi.

En declaraciones realizadas esta mañana al programa Fin de la Metáfora -que se emite por radio Nacional Rock- la titular de la cartera fabril explicó que "este conflicto comienza hace mas de 50 días y recrudece en los últimos 10, producto de que 67 de los 2.000 trabajadores de Gestamp no acatan la decisión, que además fue acordada en el Ministerio de Trabajo, de ser suspendidos con el pleno goce de haberes de bolsillo".

"Nueve de ellos se subieron a un puente grúa, permanecieron más de cuatro días tirando elementos contundentes contra otros trabajadores y SMATA licenció al resto de los compañeros porque tenían muchísimo temor. Era la violencia permanente con lo cual no se podía trabajar", puntualizó y agregó que "este grupo de personas no tienen en claro que los derechos de uno terminan cuando empiezan los de los demás".


Giorgi manifestó su preocupación por la situación actual de la autopartista que es "realmente inestable" porque "el dictado en el día de ayer de la conciliación obligatoria" por parte del gobierno bonaerense "implica un período de diálogo por 15 días hábiles y la reincorporación de estos trabajadores claramente pone en un estado de indefensión al resto de los trabajadores que fueron violentados, amenazados".

"La Provincia tuvo una solución facilista u oportunista que no coincide con lo que habíamos manifestado delante del gobierno nacional, los empresarios y el secretario general de SMATA", dijo Georgi, en defensa de la posición del sindicato y la empresa, de no atender el reclamo de “un sector minoritario” que paralizaba la actividad.