

El meme que se viralizó apenas consumada la derrota contra Croacia en el Mundial de Rusia sobre la felicitación del presidente Mauricio Macri a la Selección Argentina por "el ahorro de energía", más allá de la gracia, es inexacto técnicamente. Cuando juega la albiceleste se paraliza el país, dicho popular que confirman los datos del consumo eléctrico a nivel nacional. Pero mientras el común de la población se distrae con el juego, los operadores del sistema eléctrico se ponen en alerta para controlar las súbitas bajas y alzas en la demanda.
De acuerdo con información de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), entre las 14 y las 18 del martes, los operadores del Sistema Argentino de Interconexión (SADI) operaron en "condición de alerta". Desde una hora antes del partido en que la Selección le ganó a Nigeria y consiguió el pase a octavos de final y hasta una hora después, como "precauciones operativas", se operó con todas las líneas del STAT en servicio; se controló el perfil de tensiones del STAT y las reservas de potencia reactiva en coordinación con Transener y los centros de Control de reas; y se pusieron en operación dos unidades de la Central Hidroeléctrica Río Grande, como bomba por seguridad. La central agrega 750 MW de potencia desde Córdoba.
A la vez, antes del comienzo del partido se asignó la Reserva Rotante Operativa en las centrales hidroeléctricas El Chocón y Planicie Banderita (Neuquén), Piedra del guila (Río Negro) y Yacyretá (Corrientes), mientras que Salto Grande (Entre Ríos) llevó la regulación secundaria de frecuencia con diez grupos en servicio y cuatro grupos en reserva parada.
De acuerdo con una presentación de Cammesa, "no se registraron inconvenientes en el abastecimiento de la demanda en ninguna de las areas, como tampoco problemas de control de tensión". Fue porque desde las 14.30 del martes y durante todo el partido se tomaron distintas precauciones operativas.
A las 14.45 del martes la demanda eléctrica comenzó a disminuir: registraron una baja de 1150 MW en un lapso de 45 minutos. Durante el transcurso del primer tiempo, la demanda se estabilizó en 16.800 MW de potencia. En el entretiempo se observó una suba de aproximadamente 750 MW, que disminuyó en el mismo orden en el inicio del segundo tiempo. Al finalizar el partido comenzó un incremento de la demanda con una elevada pendiente, llegando a subir 900 MW en 15 minutos.
Que la Selección quede eliminada no ahorrará energía, e incluso puede ser que eleve un poco los costos del sistema eléctrico por las precauciones que se deben tomar para su operación y las centrales que deben entrar en servicio.










