

La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP)logró hoy evitar la exportación fraudulenta de 504 toneladas de maízpartido con destino a Chile. El operativo tuvo lugar apenas una semana después de que la acción conjunta de la Aduana y la DGI detectaran y y procedieran a secuestrar 8100 toneladas de maíz, el mayor decomiso de la historia.
En esta ocasión, los operativos de la AFP tuvieron lugar en Mendoza y pudieron avanzar luego de "analizar los perfiles de los operadores y solicitarles documentación para acreditar la trazabilidad de las ventas al exterior", indicó el organismo recaudador.

La mercadería era transportada en 18 camiones y pudo ser detectada como resultado de las tareas de verificación y control de la Aduana, realizadas para cotejar la documentación necesaria previa a la exportación.
Ante algunas inconsistencias, solicitó a los operadores que presentaran las facturas de compra en el mercado interno, con el fin de constatar la trazabilidad de la mercadería.
El cruce de información y el perfil de los operadores dio como resultados algunos indicios de maniobras fraudulentas. Entonces, se dio intervención a la Dirección General Impositiva para la evaluación de la situación y la actuación de las personas involucradas.

Según informó la AFIP fue posible determinar en un caso que "el exportador presentó facturas apócrifas para intentar justificar la adquisición de los granos y, en el otro, que se trataba de un operador sin capacidad económica".
La semana pasada un operativo conjunto DGI-AFIP se secuestró más de 8100 toneladas de maíz que estaban almacenadas en distintos depósitos del puerto de Campana, en lo que fue un decomiso récord por el volumen de la mercadería secuestrada.
La empresa intentaba exportar la mercadería por el río Paraná, en barcazas rumbo al Uruguay. Pero el dato saliente es que la maniobra tuvo el mismo perfil, es decir, productores sin capacidad operativa y económica para comercializar grandes volúmenes de granos.













