El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, afirmó esta mañana que el índice de precios (IPC) en el que trabaja el Gobierno, en medio de las críticas al INDEC, va a ser de carácter “nacional” y “recogerá la realidad de todas las regiones” del país.

“Tenemos una decisión de hacer un trabajo muy fuerte con el INDEC respecto del IPC nacional, tenemos ahí una decisión de tener un índice de precios que sea representativo de todos los argentinos”, sostuvo el titular del Palacio de Hacienda.

Según explicó a FM Vorterix, la idea es “tener un índice nacional que va a recoger la realidad de todas las regiones, de todas las provincias, cosa que nunca hemos tenido”.

En julio pasado, desde el Palacio de Hacienda se había dejado trascender que el nuevo índice será presentado antes de las elecciones legislativas de octubre, en medio del reclamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) que, a comienzos de año, emitió una moción de censura contra la Argentina por la falta de avances en la actualización de la metodología.

El organismo internacional instó al Gobierno en febrero a presentar un nuevo índice de precios al consumidor antes del 29 de septiembre, para analizarlo en noviembre durante la reunión de Directorio del organismo.

Para el Gobierno, la inflación de julio fue de 0,9%, un tercio de la estimada por las consultoras privadas que desde el Congreso difundieron un incremento de 2,55%.

Para el séptimo mes del año, la provincia de Santa Fe reportó una suba de 1,1%, mientras que San Luis admitió un alza de 2,3%, por encima de la que consignó Tierra del Fuego para ese mes, de 2,03%.

Deuda

Lorenzino aseguró hoy que los 2.070 millones de dólares correspondientes al Bonar VII que pagará el Gobierno el jueves son una “muestra contundente de que la Argentina paga su deuda en los tiempos” correspondientes.

“Es el pago más importante del año”, afirmó el titular del Palacio de Hacienda, que aclaró además que el bono fue “emitido con legislación local que no tiene nada que ver con los buitres ni con la deuda emitida a partir de la reestructuración”.

Para el jueves está previsto el desembolso de 2.070 millones de dólares, en medio de la pelea con los fondos especulativos de inversión en los tribunales de Nueva York por la deuda defaulteada.

La operación “es una muestra contundente una vez más de que la Argentina viene en los últimos diez años pagando su deuda en los tiempos que tomó el compromiso de hacerlo”, enfatizó el ministro.

“Va en línea con la argumentación que hacemos con los buitres y el 93% que entró a los canjes de 2005 y 2010, que es básicamente que nos comprometemos a una forma de pago, estamos cumpliendo, tenemos un compromiso con ese 93%, y no podemos poner en riesgo esa reestructuración por el 0,45% del total de los que no entraron que pretenden cobrar el 100% en un pago, me parece un planteo irracional”, cerró.

El jueves pasado, el Gobierno presentó su apelación ante la justicia de Nueva York contra el fallo que ordenó pagar a los holdouts más de 1.300 millones de dólares por bonos del país en default y advirtió que incluso la Cámara de Apelaciones que ratificó esa sentencia cometía ‘graves errores‘ porque, entre otros temas, anulaba planes de reestructuración.