

El Gobierno buscará que se apruebe en el Congreso, durante las sesiones extraordinarias, una ley para sancionar a los integrantes de las fuerzas de seguridad nacionales y provinciales que “abandonen injustificadamente” el servicio, como cuando recientemente se autoacuartelaron las policías provinciales en reclamo de mejoras salariales.
El proyecto busca sustituir el artículo 252 del Código Penal y fue incluido en el temario propuesto por el Poder Ejecutivo para ser tratado durante las sesiones extraordinarias del Congreso, convocadas hasta el 31 de este mes, según el decreto 2167 publicado hoy en el Boletín Oficial.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, descartó esta mañana la creación de un fondo federal para financiar los aumentos policiales concedidos por las provincias para aplacar las protestas que se sucedieron en casi todo el país y que dejaron al menos 14 muertos, tal como lo sugirió el gobernador cordobés, José Manuel De la Sota.
En su habitual conferencia de prensa matutina, Capitanich señaló que “cada una de las jurisdicciones provinciales dispone de sus fuentes de financiamiento para atender la política salarial de su administración” y puso como ejemplo la reforma impositiva que realizó el gobernador entrerriano, Sergio Urribarri.
El proyecto en contra de las protestas propone incorporar “penas específicas para aquellos miembros de las fuerzas de seguridad nacionales, provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, o agencias estatales armadas que por su naturaleza tuvieren a cargo el cuidado de personas, que a sabiendas abandonen injustificadamente actos de servicio o maliciosamente omitieren la prestación regular de la función a la que reglamentariamente están obligados”.
La medida llega como respuesta de la serie de protestas policiales en reclamo de aumentos salariales que se repitieron en varias provincias, luego del autoacuartelamiento iniciado en Córdoba dos semanas atrás, y que abrió lugar a saqueos ante la falta de patrullaje de efectivos de seguridad. Los saqueos registrados en varios distritos dejaron un saldo de al menos 14 personas muertas.
FUENTES: agencias Buenos Aires













