

Las siete horas de exposición que protagonizaron los cinco principales funcionarios del área económica en el Senado terminaron por multiplicar los temas de debate. Hernán Lorenzino, Mercedes Marcó del Pont, Ricardo Echegaray, Axel Kicillof y Guillermo Moreno, fueron a defender el proyecto de ley que instaura un generoso blanqueo de dólares. Pero los senadores de la oposición que participan en el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y Economía, apuntaron sus críticas a otros frentes, como la inflación, una de las razones que motiva la huida del peso y el crecimiento de la demanda del dólar paralelo.
El ministro Hernán Lorenzino fue el encargado de abrir las exposiciones, con los fundamentos más formales del proyecto, que es el deseo oficial de que los recursos ociosos que permanecen en cuentas en el exterior o en cajas de seguridad puedan ser destinados a reactivar el mercado inmobiliario y a financiar la inversión en energía.
Axel Kicillof utilizó unos 40 minutos para exponer un trabajo sobre los 50 años del bimonetarismo en la Argentina -en línea con los conceptos que citó el día previo en conferencia de prensa- pero en un momento fue frenado por el senador radical Mario Cimadevilla quien le reprochó ser parecido a Domingo Cavallo, que venía acá con sus discursos aburridos y después hacía lo que quería. Kicillof indico que los que piden devaluación profundizan la tendencia a la bimonetización.
La aparición en el debate del precio futuro del ladrillo dio lugar a un cruce intenso entre en el senador de la UCR Gerardo Morales y el secretario Guillermo Moreno. ¿Cuántos ladrillos me puedo comprar con un Cedin a que dólar me van a tomar el Cedin, al oficial o al paralelo?. El secretario, sin tecnicismos, le respondió que al valor que fija quien lo vende pero no aclaro si era al dólar oficial o al dólar paralelo, generando más confusión aún.
La presidenta del Banco Central salió al cruce de Morales y Cimadevilla, quienes presionaban a Moreno para que precise cuanto iban a recibir quienes compren los bonos en dólares. El dólar oficial está a 5,23, intentó mediar Aníbal Fernández, quien comandó el debate, pero sin éxito. Morales insistió en que ningún poseedor de divisas invertirá en bonos si luego recibe dólares en mano a precio oficial. La respuesta fue intermedia: Usted me habla acerca de qué pasa si va a vender los dólares a otro mercado. La idea de este proyecto es incorporar el dinero al circuito legal. Ahí apareció la presidenta del BCRA, quien señaló que nosotros no estamos en un tupper, sabemos que existe, pero estamos convencidos que el tipo de cambio en la Argentina sigue siendo competitivo, admitió (ver aparte).
El momento mas difícil para el equipo económico llegó casi al final de las siete horas de debate. A mi me interesa saber qué van a hacer ustedes con la inflación, además de seguir mintiendo con la inflación del Indec y el congelamiento de precios, apuntó uno de los radicales. En ese instante ,luego de tocarse la oreja, el secretario de Comercio Interior le pidió a Aníbal Fernández que subiera el volumen de los micrófonos porque no se escuchaba bien. Moreno, el funcionario que concentró la atención de la mayoría de los senadores (principalmente Laura Montero, Liliana Negre de Alonso, Rubén Giustiniani y Adolfo Rodríguez Saá), contesto que el Indec no mide la inflación sino la variación de varios precios de la economía que suben y bajan. Nunca dio precisiones sobre números, sino que abundó en datos secundarios como que el precio del ganado bovino en el Mercado de Liniers esta quieto hace dos años.
Lorenzino aclaró que los títulos públicos que se usen para el blanqueo serán impresos en la Casa de la Moneda, y no en la ex Ciccone, con denominaciones que arrancarán en 100 dólares. También remarcó que aún no están definidas las obras a las cuales estarán destinados los capitales que ingresen porque dependerá de la cantidad de dinero ingresado.
La senadora Alonso propuso que la norma incorpore la necesidad de declarar el origen de los fondos para evitar la llegada de dólares producto de acciones ilícitas y que todos los títulos sean nominativos. Al respecto, Echegaray garantizó que la AFIP cuenta con los mecanismos para evitar que se exterioricen fondos ilícitos, mientras que Lorenzino ustificó que los Baaden sean al portador para que lleguen a inversores menos sofisticados.










