

Después de que, con el voto de propios y aliados, el kirchnerismo convirtiera en ley dos acuerdos de cooperación con China -un convenio de cooperación económica bilateral y otro para la instalación de una estación de espacio lejano de ese país en Neuquén-, hoy el Gobierno les dio el último aval desde el lado argentino al promulgarlos como ley y publicarlos en el Boletín Oficial.
Son acuerdos que fueron que la presidenta Cristina Kirchner firmó con su par chino, Xi Jinping, en julio pasado y que recibieron cuestionamientos opositores y de industriales por el nivel de dependencia y la sesión de soberanía que, según esas voces críticas, involucran con respecto a China.
Durante el debate en el Congreso, el oficialismo argumentó que "el acuerdo favorecerá el ingreso de divisas y permite modernizar la industria argentina, incrementar su competencia y competitividad”.
La oposición, en tanto, sostuvo que el convenio entrega “el futuro del desarrollo argentino" y no modifica “en nada” la estructura de lo que la Argentina le vende a China (José Ignacio de Mendiguren) y criticó que el plazo del convenio marco sea de 50 años (Margarita Stolbizer) y "los chinos” lleguen a la Argentina “con proyectos chinos, tecnología china y mano de obra china" (Mario Negri).
Justamente, la cuestión de la radicación, la mano de obra y el régimen laboral fue uno de los puntos que más dudas suscitó.
Al respecto, el convenio marco establece, en su artículo 6, que “cada parte otorgará a la otra facilidades para la realización de actividades lucrativas, ya sean laborales o profesionales, como empleados o por cuenta propia, en condiciones de igualdad con los nacionales del Estado receptor”.
El acuerdo para la construcción de a la estación de espacio lejano, en tanto, establece que “el Gobierno argentino facilitará la tramitación de permisos de ingreso y/o la emisión de visas” para los ciudadanos chinos que trabajen en ese proyecto. Y mientras puntualiza que “las relaciones laborales” y “el poder de policía en materia laboral y de seguridad e higiene” se regirán por la ley argentina, también fija que “las remuneraciones y otros ingresos abonados por el gobierno de China a los empleados de nacionalidad china que trabajen en el proyecto” se regirán por la legislación china.
Los siguientes son los textos completos de los acuerdos, en castellano e inglés:













