

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció los castigos que recibirán los hinchas en caso de que protagonicen hechos de violencia durante la Copa Confederaciones de junio próximo y el Mundial del año que viene.
A través de una ley, el gobierno ruso determinó que los hechos de violencia serán castigados con multas económicas de hasta 20 mil rublos (u$s 355), quince días de prisión y deportación para los extranjeros.
Los que actúen con violencia en territorio ruso también podrán ser arrestados antes de ser expulsados del país e incluso se prevén multas de casi u$s 900 y prohibición de entrar a estadios por siete años.
Asimismo, las autoridades tendrán la potestad de prohibir el ingreso de hinchas con antecedentes violentos en su país de origen.













