La quiere cerrar con un moño". La frase le pertenece a un abogado con acceso al expediente que investiga la muerte de Alberto Nisman, y apunta contra la fiscal Viviana Fein. Pero también la murmuran, aunque no públicamente, los familiares del fiscal especial de AMIA que encabezan la querella, que creen que la fiscal quiere a toda costa rotular la causa como un suicidio.

Durante el fin de semana largo se potenciaron las diferencias entre Fein y la jueza federal y ex esposa de Nisman, Sandra Arroyo Salgado. Desde la Fiscalía creen que Arroyo Salgado lleva adelante una investigación paralela que está motivada más por el vínculo afectivo que tenía con la víctima que con los datos que arrojan las pericias. E internamente consideran que el informe que presentaron los peritos de la querella, así como la presentación animada y en 3D que darán a conocer en breve, no tienen el sustento necesario como para ratificar la teoría del magnicidio que argumentó Arroyo Salgado el 5 de marzo.

Desde la querella, en cambio, sostienen con cada vez más convencimiento que Nisman fue asesinado y creen que Fein da todos los pasos para convertir la carátula de "muerte dudosa" en "suicidio". En esa línea, argumentan, fue que designó como perito a Enrique Prueger, luego recusado por Arroyo Salgado por no contar con el título habilitante. Fuentes judiciales aseguran que se presentará mostrando el título, aunque deslizan que ello no logrará modificar la recusación. "Está afuera no por el título, sino porque siempre se inclinó por el suicidio", explican.

A la espera de la junta médica del lunes que viene, se aguarda que Arroyo Salgado realice nuevos planteos para asegurarse que la misma se desarrolle con todos los controles que amerita el caso. Y también existen expectativas en torno a los resultados que pueden surgir en torno a la pista que sembró la ex mujer de Nisman, la que sugiere que el presunto homicidio podría haber sido por un móvil económico, y que derivó en las declaraciones de Diego Lagomarsino quien le facilitó a Nisman el arma con la que se efectuó el disparo sobre que el fiscal le sacaba la mitad del sueldo que le depositaban por su trabajo como asesor informático en la Unidad AMIA.

Arroyo Salgado fue quien dijo que Lagomarsino tenía acceso a una cuenta de la familia de Nisman en el exterior. Esa revelación habría resentido la relación entre la ex mujer del fiscal y la madre y hermana de éste, quienes postergaron su declaración ante Fein y deberán hacerlo en los próximos días.