

La disputa entre la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, y el gobierno de Donald Trump por el controvertido peaje de congestión ha alcanzado nuevos niveles máximos de tensión.
Mientras las autoridades federales exigen que el sistema sea desmantelado, Hochul sigue defendiendo su implementación, lo que ha generado un choque con la Casa Blanca.
La pelea entre el gobierno de Trump y Nueva York por el peaje de congestión
La administración Trump otorgó a Nueva York una extensión de 30 días para responder a la orden que exige la eliminación del peaje de congestión en Manhattan.
La fecha límite original, el 21 de marzo, fue prorrogada hasta el 20 de abril. Sean Duffy, secretario de Transporte, emitió un comunicado en el que acusó a Kathy Hochul de actuar en contra del interés público y de incumplir la disposición federal.
Duffy afirmó que esta negativa es una falta de respeto hacia el gobierno federal y advirtió que el incumplimiento de la orden no será tolerado. Este conflicto también está relacionado con otras decisiones de la gobernadora, como la negativa a aprobar gasoductos que, según Duffy, podrían reducir los costos del combustible.

La pelea se agrava debido a que la Donald Trump, que posee propiedades dentro de la zona afectada por el peaje, busca revocar la autorización del sistema. Ante este escenario, la MTA(Autoridad Metropolitana de Transporte) presentó una demanda para evitar que la administración de Trump revoque el sistema de cobros.
De acuerdo con lo informado, el peaje de congestión tiene los siguientes objetivos y características principales:
Cobro de 9 USD a los conductores que ingresan a Manhattan al sur de Central Park.
Reducción del tráfico en la zona, lo que beneficia la circulación de vehículos.
Proyección de ingresos de 500 millones de USD para 2025, destinados a mejorar el transporte público.
Kathy Hochul defiende el peaje de congestión en Manhattan, Nueva York
A pesar de las presiones y críticas del gobierno federal, Kathy Hochul se mantiene firme en su apoyo al peaje de congestión. Desde su oficina, se afirmó que el sistema ha demostrado ser efectivo en la reducción del tráfico y la mejora de la circulación en Manhattan.

Además, se defendió que el peaje ha logrado su propósito, y las autoridades locales continúan con el monitoreo del sistema, sin intención de suspenderlo.
La MTA también respalda el sistema, asegurando que el programa ha cumplido con todos los procedimientos legales y que no puede ser cancelado de manera unilateral. Según Telemundo, Janno Lieber, presidente de la MTA dijo que "nada va a cambiar" y el sistema seguirá en funcionamiento.











