

Los crecientes roces entre potencias globales han encendido las alarmas sobre un posible conflicto de escala mundial. En medio de tensiones por el control geopolítico de Asia y Europa del Este, una nueva preocupación militar empieza a dominar la atención de analistas y expertos.
Desde hace décadas, Estados Unidos ha mantenido la superioridad aérea global gracias a una ventaja estratégica clave. Sin embargo, esa supremacía podría estar en riesgo debido a los avances de sus principales adversarios: China y Rusia.
Ambos países han invertido en sistemas que podrían amenazar directamente la seguridad nacional estadounidense. Y si se confirma lo que revelaron los últimos reportes militares, esta tecnología podría cambiar para siempre el equilibrio del poder en un eventual conflicto a gran escala.

¿Cuál es la tecnología que pone en riesgo el dominio aéreo de Estados Unidos?
La clave de la ventaja aérea estadounidense reside en sus aviones furtivos, como el F-35 Lightning II o el bombardero B-2 Spirit, diseñados para operar sin ser detectados por radares enemigos. Esta capacidad de "invisibilidad" ha permitido al Pentágono lanzar ataques sin advertencia previa durante décadas.
Pero ahora, informes recientes indican que China y Rusia han desarrollado sistemas capaces de detectarlos. Estas nuevas plataformas utilizan radares de frecuencia muy baja, también conocidos como radares VHF, que operan en bandas donde los materiales furtivos pierden efectividad.
¿Cómo funcionan estos radares?
- Rusia desplegó el sistema Nebo-M, que combina bandas VHF, UHF y L para rastrear aeronaves con baja firma de radar.
- China introdujo el JY-27A, con una matriz de radar de barrido electrónico activo (AESA) que amplía el rango de detección.
- Ambos países integran estos radares con sensores satelitales y sistemas aéreos para obtener una visión en capas del espacio aéreo.
Además, circulan rumores sobre el desarrollo chino de un radar de impulso sintético (SIAR), instalado en el mar del sur de China, que podría detectar aviones furtivos a altitudes medias con mayor precisión.

¿Qué consecuencias puede tener esta tecnología en una futura guerra?
El impacto potencial de esta tecnología es enorme. Si China y Rusia pueden rastrear a los aviones más avanzados de EE.UU., la estrategia militar estadounidense basada en ataques sorpresa quedaría obsoleta. Y eso modificaría profundamente cualquier cálculo bélico.
Riesgos estratégicos inmediatos
- Estados Unidos podría perder su capacidad de respuesta rápida y sigilosa.
- China y Rusia ganarían control sobre zonas clave como el estrecho de Taiwán o el Báltico.
- La disuasión nuclear también se vería afectada, al exponer bombarderos estratégicos antes invisibles.
Un incidente reciente en Yemen refuerza esta preocupación: según algunos medios occidentales, un F-35 estuvo a punto de ser derribado por sistemas A2/AD operados por rebeldes hutíes, posiblemente con apoyo tecnológico extranjero. Aunque los detalles no se han confirmado, el hecho generó alarma en el Pentágono.
La historia ya lo había anticipado. En 1999, Serbia logró derribar un F-117 Nighthawk usando tácticas similares con sistemas de radar soviéticos. Hoy, con tecnologías mucho más avanzadas, el dominio furtivo de EE. UU. parece estar en declive.











