

Durante los trabajos de excavación para construir una planta de energía nuclear limpia en la costa de Suffolk, Inglaterra, un hallazgo arqueológico sorprendió a todo el equipo. Un arqueólogo novato encontró un tesoro histórico compuesto por 321 monedas de plata, cuidadosamente envueltas y en excelente estado de conservación.
El descubrimiento se produjo el pasado 7 de enero, cuando Andrew Pegg, integrante del proyecto Sizewell C y de Oxford Cotswold Archaeology (OCA), detectó un pequeño paquete de plomo y tela enterrado cerca del sitio de construcción. Al abrirlo, encontró cientos de monedas que datan de entre los años 1036 y 1044, en pleno contexto de cambios políticos tras la coronación de Eduardo el Confesor.
Un hallazgo arqueológico que ilumina la historia medieval inglesa
Bautizado afectuosamente como "The Pasty" debido a su forma similar a una empanada tradicional, el paquete contenía monedas acuñadas durante los reinados de Harold I, Harthacnut y Eduardo el Confesor. Según los especialistas, este hallazgo ofrece una ventana única a un período histórico "turbulento y lleno de incertidumbres".

Los expertos creen que el tesoro pudo haber sido enterrado por un ciudadano de estatus medio para proteger sus ahorros en tiempos de cambios de gobierno. El valor de las monedas, equivalente a una pequeña manada de vacas en aquella época, sugiere que pertenecían a alguien con cierta influencia local, aunque no a una figura de alto rango nacional.
El significado del tesoro descubierto en Suffolk
Para Alexander Bliss, especialista en numismática de OCA, el descubrimiento es de enorme valor histórico: "Este nuevo tesoro de monedas nos brinda una valiosa visión del contexto social y político de mediados del siglo XI".
La hipótesis más aceptada es que su dueño original habría escondido el paquete para resguardarlo de las convulsiones políticas, pero nunca pudo volver a recuperarlo. Tal vez la muerte, el exilio o simplemente el olvido dejaron enterrado este fragmento de historia durante siglos.
Un momento inolvidable para Andrew Pegg
Con tan solo nueve meses de experiencia como arqueólogo, Andrew Pegg definió el momento del hallazgo como "un privilegio increíble". "Estaba temblando cuando vi el borde de una moneda sobresaliendo del suelo", relató emocionado.
Pegg, quien es oriundo de Leiston, Suffolk, expresó su orgullo por haber contribuido a preservar la memoria de su región: "Este hallazgo es una cápsula del tiempo arqueológica perfecta".
Desde Sizewell C y OCA aseguraron que se trabaja para que estos descubrimientos sean accesibles al público, permitiendo que la historia de Suffolk y su importancia en la Edad Media siga viva para las futuras generaciones.












