

Una nueva ola de estafas digitales está circulando en Estados Unidos y pone en riesgo los datos personales de millones de personas. El FBI emitió una advertencia nacional tras detectar múltiples fraudes en nombre de compañías de seguros de salud, cuyo objetivo es robar información financiera y médica sensible.
Estos engaños llegan por correo electrónico y mensajes de texto que simulan provenir de aseguradoras reconocidas. Utilizan logotipos oficiales, lenguaje profesional y apelan a la urgencia para que las víctimas actúen sin pensar.
Alerta del FBI: la nueva estafa para robar datos médicos y bancarios
Los estafadores usan técnicas avanzadas de ingeniería social para ganarse la confianza de los usuarios. Según el FBI, los mensajes suelen incluir excusas como:
Supuestos reembolsos médicos pendientes
Avisos por cobros de servicios no cubiertos
Actualizaciones falsas de pólizas
Alertas de seguridad que exigen acción inmediata

Al hacer clic en los enlaces o responder al mensaje, la víctima puede entregar datos bancarios, números de póliza, detalles sobre tratamientos médicos o incluso realizar pagos a cuentas fraudulentas.
"El objetivo es generar miedo y urgencia. Muchas víctimas ni siquiera se toman el tiempo de verificar el origen del mensaje", advirtió un vocero del FBI.
El principal objetivo de estas estafas: los adultos mayores
Los adultos mayores son el grupo más afectado por este tipo de estafas. Por su frecuencia en el uso de servicios de salud y menor familiaridad con amenazas digitales, representan un blanco fácil.
El experto en cibercrimen Steve Weisman explicó que "con la edad, funciones cerebrales como el escepticismo se debilitan, lo que aumenta la probabilidad de caer en engaños bien diseñados".
Muchos de estos fraudes incluyen promesas de atención médica gratuita o descuentos falsos, diseñados para sonar beneficiosos pero que, en realidad, son trampas para capturar información confidencial.
Cómo protegerte de las estafas, según el FBI
Ante el aumento de estos intentos de fraude, el FBI publicó una serie de recomendaciones clave para evitar caer en la trampa:
Nunca compartas datos médicos o bancarios a través de mensajes no solicitados.
No hagas clic en enlaces sospechosos, aunque parezcan legítimos.
Verifica directamente con tu aseguradora cualquier información que recibas.
Usa contraseñas seguras y activa la verificación en dos pasos.
Mantén actualizado tu software antivirus y sistemas de protección.
¿Qué hacer si ya caíste en una estafa médica digital?
Si ya hiciste clic en un enlace o compartiste información confidencial, el FBI recomienda actuar de inmediato y denunciar el caso al Centro de Denuncias de Delitos en Internet (IC3).
Puedes incluir en el reporte:
El nombre del remitente
Correo electrónico o número de teléfono desde el cual llegó el mensaje
Capturas de pantalla del contenido fraudulento
Estas denuncias son esenciales para rastrear a los responsables y evitar que más personas sean víctimas del mismo esquema.















