

El pegamento instantáneo es uno de esos productos que nunca falta en casa: económico, práctico y capaz de unir casi cualquier material en segundos. Pero también es cierto que, cuando se seca de más, puede generar accidentes incómodos, sobre todo cuando queda adherido a los dedos.
En redes sociales surgió un truco que promete solucionar ese problema con ingredientes que todos tienen en la cocina. Un video se volvió viral al mostrar cómo el vinagre y el bicarbonato de sodio pueden mejorar el uso del adhesivo y evitar complicaciones. El clip generó cientos de comentarios de usuarios que aseguran que el método funciona de verdad.
Vinagre y bicarbonato: la combinación que sorprende para usar pegamento sin accidentes
El vinagre actúa como un desprendedor suave cuando el adhesivo se endurece en la piel más de lo esperado. Al colocarlo en un pulverizador y rociarlo sobre los dedos, ayuda a separar las superficies sin lastimar.

El bicarbonato de sodio, en cambio, cumple otro rol: funciona como un acelerador natural del pegamento. Solo hay que espolvorear una pequeña cantidad sobre la superficie a reparar y agregar luego una gota del adhesivo. La reacción con el cianoacrilato endurece la mezcla en segundos, logrando una unión mucho más firme.
Este truco es especialmente útil cuando se trabaja con piezas pequeñas, ya que se puede aplicar el bicarbonato con un cepillo o pincel para lograr mayor precisión. Muchos aficionados al modelismo y la carpintería ya usaban este procedimiento, pero recién ahora se popularizó entre el público general.
Precauciones: usar guantes y manipular con cuidado
Aunque la técnica es efectiva, expertos recomiendan utilizar guantes finos o algún tipo de protección. La reacción entre el bicarbonato y el pegamento genera calor y endurece el material muy rápidamente, lo que puede ser incómodo si se trabaja directamente sobre la piel.













