

La reconocida marca de bolsas plásticas Ziploc enfrenta una demanda colectiva en Estados Unidos. Una consumidora alega que la empresa ocultó información sobre la liberación de microplásticos al usar sus productos en el microondas o el congelador. La denuncia, presentada en abril de 2025, pone en duda la seguridad de un producto cotidiano en millones de hogares.
La querella sostiene que las bolsas, etiquetadas como "aptas para microondas" y "aptas para congelador", liberan microplásticos potencialmente dañinos cuando se utilizan según las indicaciones del fabricante. La demandante busca una compensación económica y medidas cautelares para detener la promoción engañosa de estos productos.
La reconocida compañía de bolsitas Ziploc enfrenta una demanda millonaria
Linda Cheslow es la mujer que llevó adelante la demanda contra la compañía de bolsitas Ziploc. La demandante argumenta que este producto que está fabricado con polietileno y polipropileno pueden degradarse bajo temperaturas extremas, como las del microondas o el congelador, liberando microplásticos en los alimentos.
La demanda menciona productos específicos, como las bolsas Ziploc Freezer Bags y Ziploc Slider Storage Bags, que, según la denunciante, no deberían ser etiquetadas como seguras para estas aplicaciones. La querella alega que S.C. Johnson violó leyes de competencia desleal y publicidad engañosa en California, además de enriquecimiento ilícito.

Cheslow busca que la demanda sea certificada como acción colectiva, incluyendo a residentes de California, y solicita compensación por daños, restitución y sanciones punitivas. Hasta el momento, S.C. Johnson no emitió una respuesta pública a las acusaciones. La empresa adquirió la marca Ziploc en 1998 y la ha promovido como una solución segura y conveniente para el almacenamiento de alimentos.
¿Cuáles son las consecuencias de los microplásticos de las bolsitas Ziploc?
Los microplásticos son fragmentos de plástico de menos de 5 milímetros que pueden ingresar al cuerpo humano a través de la alimentación. Estudios recientes han detectado su presencia en órganos humanos, incluyendo el cerebro y el sistema reproductivo. Se les asocia con alteraciones hormonales, daños al ADN y enfermedades cardiovasculares, según informa el portal About Lawsuits acerca de esta demanda.
En el archivo, los abogados sostienen que el uso habitual de las bolsas Ziploc, tal como se indica en sus etiquetas, podría exponer a los consumidores a estos riesgos sin su conocimiento. Este caso podría sentar un precedente en la regulación de productos plásticos de uso alimentario.

Si la demanda falla a favor de Linda Cheslow y los ciudadanos de California, podría obligar a S.C. Johnson a modificar el etiquetado de sus productos y a compensar a los consumidores afectados. Además, podría desencadenar una revisión más amplia de la seguridad de los envases plásticos utilizados en la cocina.













