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La administración de Donald Trump impuso una política de tolerancia cero en el sistema migratorio de Estados Unidos. La gestión puso en marcha un plan para endurecer las vías legales de ingreso al país, las condiciones de permanencia e instauró un proyecto de deportaciones masivas.

Ahora, el presidente republicanoanunció la reapertura de Alcatraz, famosa cárcel caracterizada por ser una de las más duras del país. En su lucha contras las bandas criminales, envió a cientos de pandilleros latinoamericanos a la cárcel de máxima seguridad de El Salvador.

Ahora, estos inmigrantes corren el peligro de ir a la cárcel que fue históricamente la más peligrosa el mundo.

Atención inmigrantes: ¿Cómo han avanzado las detenciones en la administración de Trump?

En Estados Unidos, la detención de inmigrantes indocumentados ha aumentado significativamente bajo las políticas migratorias de la administración de Donald Trump. La promulgación de la Ley Laken Riley en enero de 2025 ha ampliado las facultades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para arrestar a personas en situación irregular acusadas o condenadas por delitos como robo o agresión, incluso sin una petición formal.

Además, se han eliminado restricciones que impedían las detenciones en lugares considerados sensibles, como escuelas, hospitales e iglesias, permitiendo a los agentes de ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) realizar arrestos en estos espacios sin necesidad de aprobaciones especiales.

La reapertura de Alcatraz: una gran amenaza para inmigrantes

El presidente Donald Trumpanunció su intención de reabrir y ampliar la prisión de Alcatraz, ubicada en la bahía de San Francisco, para albergar a los delincuentes más peligrosos del país. La prisión, cerrada en 1963 debido a los altos costos operativos y al deterioro de su infraestructura, actualmente es un parque nacional y una atracción turística.

Trump justificó su propuesta como una medida para reforzar la ley y el orden, destacando la necesidad de aislar a los criminales violentos y reincidentes. Además, funcionarios han sugerido que Alcatraz podría utilizarse para detener a inmigrantes con antecedentes penales, en el contexto de políticas migratorias más estrictas.

"Estoy dando instrucciones a la Oficina de Prisiones, junto con el Departamento de Justicia, el FBI y Seguridad Nacional, para reabrir una Alcatraz sustancialmente ampliada y reconstruida", escribió el presidente en un comunicado oficial.