

Tener una green card o tarjeta de residencia permanente en Estados Unidos no garantiza inmunidad frente a la deportación.
Aunque los titulares de este estatus legal gozan de ciertos derechos, la permanencia en el país está sujeta a una condición clave: cumplir con todas las leyes federales, estatales y locales. De lo contrario, podrían enfrentar un proceso judicial que derive en la pérdida de su estatus y expulsión del país.
Alerta extranjeros: ¿cuándo puede ser deportado un residente permanente?
Según lo establece el National Constitution Center, los residentes permanentes están obligados a respetar las leyes estadounidenses en todos los niveles. En caso de violar alguna norma, el gobierno tiene la facultad de iniciar un proceso legal de remoción, que se lleva a cabo ante los tribunales de inmigración del Departamento de Justicia.

Es importante destacar que ni el ICE (Servicio de Control de Inmigración y Aduanas) ni la CBP (Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza) pueden revocar por sí solos una residencia permanente. Solo un juez de inmigración puede ordenar la deportación de un titular de green card, luego de un juicio formal.
¿Qué pasos debe seguir el gobierno para deportar a un residente legal?
Antes de proceder con la expulsión, el gobierno debe emitir un aviso de comparecencia, que funciona como una especie de acusación formal. Allí se enumeran las razones legales por las que se considera que la persona es deportable.
Durante el juicio de inmigración, las autoridades deben presentar pruebas claras y convincentes. Estas pueden incluir:
Condenas por delitos graves.
Pruebas de que la persona presentó impuestos como no residente, lo cual podría interpretarse como un abandono de su estatus legal.
Registros de ingreso o salida que sugieran residencia prolongada fuera del país.
Este procedimiento puede extenderse en el tiempo, y en caso de una decisión adversa, el residente tiene derecho a apelar ante la Junta de Apelaciones de Inmigración y, si es necesario, ante un Tribunal Federal de Apelaciones.
¿Qué derechos tiene un residente ante un proceso de deportación?
A pesar de lo delicado del escenario, los residentes permanentes cuentan con garantías procesales, como:
El derecho a ser notificados oficialmente de los cargos en su contra.
La posibilidad de defenderse ante un juez de inmigración.
Acceder a representación legal, aunque no siempre gratuita.
Presentar apelaciones si el fallo es desfavorable.
Por eso, si una persona con green card enfrenta un proceso migratorio, es crucial contar con asesoramiento legal especializado y mantenerse informado sobre sus derechos y obligaciones dentro del sistema judicial estadounidense.














