Salud

Bruxismo, el trastorno dental que afecta a casi todos: qué es y cómo se trata

Conoce cuáles son los síntomas del bruxismo (rechinamiento de los dientes), cómo se trata y de qué forma puede prevenirse.

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Según el sitio web de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades no transmisibles constituyen la causa predominante de fallecimiento y limitaciones físicas a nivel global. No obstante, afirman que gran cantidad de ellas pueden evitarse mediante la disminución de los elementos de riesgo habituales.

Por esa razón, conoce qué es el bruxismo (rechinamiento de los dientes), cuáles son sus síntomas, cómo reducir los factores de riesgo y cuáles son los mejores tratamientos disponibles.

¿Qué es el bruxismo (rechinamiento de los dientes)?

Según explica el portal sobre salud Mayo Clinic, el bruxismo, conocido como el rechinamiento o apretamiento involuntario de los dientes, es un trastorno que afecta a muchas personas en todo el mundo. Este hábito puede ocurrir durante el día o la noche y a menudo se asocia con el estrés, la ansiedad o problemas de alineación dental. Los síntomas incluyen desgaste dental, dolor en la mandíbula y dolores de cabeza.

Los expertos advierten que el bruxismo no tratado puede llevar a complicaciones más serias, como trastornos temporomandibulares y daños en los dientes. Se recomienda a quienes sospechan que padecen este trastorno consultar a un dentista, quien puede ofrecer tratamientos como férulas o técnicas de manejo del estrés para mitigar sus efectos.

¿Cuáles son los síntomas del bruxismo (rechinamiento de los dientes)?

Los síntomas del bruxismo incluyen:

- Rechinar o apretar los dientes, a veces con un sonido fuerte que puede despertar a otros.
- Dientes aplanados, fracturados, partidos o flojos.
- Desgaste del esmalte dental, exponiendo capas más profundas de los dientes.
- Mayor dolor o sensibilidad dental.
- Músculos de la mandíbula cansados o rígidos, o dificultad para abrir o cerrar la mandíbula.
- Dolor o inflamación en la mandíbula, cuello o rostro.
- Dolor similar al de oído, aunque no relacionado con problemas auditivos.
- Dolores de cabeza que comienzan en las sienes.
- Lesiones por morder la parte interna de la mejilla.
- Alteraciones en el sueño.

Es recomendable consultar a un dentista o médico si se presentan estos síntomas. También es importante mencionar cualquier signo de bruxismo en los niños durante las consultas dentales.

¿Cómo saber si una persona tiene bruxismo (rechinamiento de los dientes)?

El diagnóstico del bruxismo comienza durante los exámenes odontológicos regulares, donde el dentista busca signos evidentes de este trastorno, como cambios en los dientes y en la boca. Si se identifican indicios de bruxismo, el dentista realizará un seguimiento en las consultas posteriores para evaluar la progresión del problema y determinar la necesidad de tratamiento. Además, se revisarán síntomas como dolor en los músculos de la mandíbula y anomalías dentales, utilizando radiografías si es necesario.

Para establecer la causa del bruxismo, el dentista hará preguntas sobre la salud dental general del paciente, sus medicamentos, rutinas diarias y hábitos de sueño. Si se sospecha que el bruxismo está relacionado con problemas del sueño, se puede recomendar una consulta con un especialista en medicina del sueño para realizar pruebas adicionales. Asimismo, si se identifican factores psicológicos como la ansiedad, el paciente podría ser derivado a un terapeuta para abordar estos aspectos.

¿Cuál es el mejor tratamiento para el bruxismo (rechinamiento de los dientes)?

El bruxismo, o rechinamiento de los dientes, es un problema que afecta a muchas personas, aunque en muchos casos no requiere tratamiento. Sin embargo, si el bruxismo es severo, es importante consultar a un dentista o médico para explorar opciones de tratamiento que pueden incluir férulas, protectores bucales y corrección dental para evitar el daño a los dientes y aliviar el malestar mandibular.

Además de los enfoques odontológicos, existen métodos que pueden ayudar a manejar el bruxismo. El control del estrés y la ansiedad es fundamental; técnicas como la meditación y la terapia pueden ser efectivas. También se pueden realizar cambios en el comportamiento, como practicar la posición correcta de la mandíbula y considerar la biorretroalimentación para aprender a controlar la actividad muscular de la mandíbula.

En algunos casos, los medicamentos pueden ser una opción, aunque su eficacia varía. Relajantes musculares, inyecciones de bótox y medicamentos para la ansiedad pueden ser recomendados por un médico en situaciones específicas. Asimismo, es crucial abordar cualquier trastorno relacionado, como problemas de sueño o afecciones médicas preexistentes, que puedan estar contribuyendo al bruxismo.

Bruxismo (rechinamiento de los dientes): posibles factores de riesgo

El bruxismo, o rechinamiento de los dientes, puede ser influenciado por varios factores de riesgo, entre los que destacan el estrés y la ansiedad, que pueden desencadenar este comportamiento. La edad también juega un papel, ya que es más común en niños, aunque tiende a desaparecer en la adultez. Además, las personas con personalidades agresivas o competitivas, así como aquellas que consumen sustancias como tabaco, cafeína o alcohol, tienen mayor predisposición. La herencia familiar y la presencia de ciertos trastornos médicos o de salud mental también pueden aumentar el riesgo de desarrollar bruxismo.

Para finalizar, es aconsejable consultar con un especialista en salud ante cualquier duda o síntoma. La información médica puede ser compleja y es importante acudir a fuentes confiables para vitar la automedicación y basar las decisiones de tratamiento en evidencia clínica.

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