Juan Carlos Donato (*)
Se encuentra en pleno proceso de licitación la Terminal Multipropósito de Cargas y Contenedores del puerto de Mar del Plata. La misma sumó ahora incertidumbre al resultado de apertura de ofertas que se realizará el lunes 10 de noviembre a las 12 horas, en la sede del Consorcio Portuario.
Esto es así porque la naviera francesa CMA – CGM, canceló el servicio Puerto de Mar del Plata – Puerto de Santos (Brasil), inaugurado el 12 de mayo de 2024. Se repite así lo sucedido en julio de 2019, cuando la naviera MSC dejó de operar en este puerto, generando pérdida de puestos de empleo, de carga que migro al camión y posicionamiento de la terminal. Costó mucho esfuerzo y tiempo, recuperar la confianza de los cargadores.
He tenido la responsabilidad de estudiar, implementar y gestionar procesos operativos y comerciales en estos muelles, avizorando inconsistencias que, desde lo institucional, a veces no se advierten. Veamos.
Desconexión con el hinterland portuario: el parque industrial de la ciudad no exporta por el puerto local. La llegada de la multinacional fábrica de papas fritas, Lamb Weston en 2024 alimentó expectativas de cambio que no fueron suficientes a la luz de este resultado.
A 40 kilómetros en otro parque industrial, el de la ciudad de Balcarce, sobre la ruta 226 (pocas terminales portuarias cuentan con esta ventaja), radica McCain, gigante global, fabricante de papas fritas. A pesar de eso, exporta su producción a Brasil, a través de aproximadamente 30 camiones diarios, que atraviesan 3.100 kilómetros de rutas.
Marcadas asimetrías entre el transporte por agua y el terrestre: por la integración vertical de las navieras con sus propias terminales que les permite decidir rutas más convenientes, no cesa el goteo de contenedores por autovía 2 a puertos del AMBA. A esto se suman las trazas del sistema navegable fluvial que direccionan la navegación comercial a puertos de países vecinos y la descoordinación institucional entre Nación, Provincia y Municipio.
Una errática política: en los últimos 8 o 9 años se viene alentando la competencia entre puertos argentinos, sin programas de complementación. Ahora el problema es más complejo de abordar, porque el mundo cambió la forma de producir y comerciar, entonces deben competir con corredores productivos integrados. Atención a la licitación en ciernes de la Vía Navegable Troncal (VNT).
El desafío de planificar un sistema logístico federalizado como Alemania, o de concesiones privadas en consonancia a un modelo nacional exportador con respaldo institucional como Australia, no es técnico, si no político. Tenemos que ser capaces de salir de este modelo fragmentado, poco transparente y sin planificación estratégica funcional para algunos, costoso para la mayoría y perjudicial para el país.
(*) Coordinador de Puertos de la subsecretaría de Puertos y Vías Navegables de la Nación (2012/2015). Gerente en Terminal de Contenedores Dos (TC2 S.A.) del Puerto de Mar del Plata (2018/2022).