Tras años de abandono, el ferrocarril toma vida en los Estados Unidos. Junto a las inversiones privadas, el estado también muestra presencia. El Comité Regional de Transporte de Miami-Dade aprobó por votación unánime pagar más de u$s 313 millones a la firma italiana Ansaldo Breda, por la compra de 136 nuevos vagones del Metrorail.

La votación de los cinco comisionados constituye el primer paso en el proceso de aprobación del contrato que el alcalde Carlos Giménez recomendó entregar a dicha compañía, para reemplazar los vagones del servicio de trenes elevados, que opera desde 1984.

Esta aprobación es una victoria para el alcalde Carlos Giménez, quien había recomendado que los comisionados votaran a favor del contrato, ya que durante la licitación la compañía había ofrecido suministrar los nuevos vagones a un costo de casi $5 millones menos que la propuesta de la compañía rival, Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), de España.

Se espera que en los próximos días llegue a la comisión en pleno la propuesta de Giménez de otorgar el contrato de un poco más de $313 millones a AnsaldoBreda. Si la comisión lo aprueba, se firmará el contrato y la firma italiana comenzará a construir los vagones.

Karla Damian, vocera del Departamento del Transporte Público de Miami-Dade (MDT) dijo que se espera que la firma entregue los vagones entre 2015 y 2017.

Aunque la administración previa del alcalde Carlos Alvarez había recomendado que se le otorgara el contrato a AnsaldoBreda, el proceso se retardó cuando en marzo del 2011 CAF-USA protestó ante la Administración Federal del Transporte Público, entidad que le dio la razón a los españoles, ya que la licitación no se había ajustado a las reglas establecidas y ordenó al Condado Miami-Dade reevaluar el contrato. Finalmente, volvió a manos de los italianos, por proponer costos más rentables para el condado.