

Las armadoras brasileñas y mexicanas acordaron apremiar de forma conjunta a sus respectivos gobiernos para aumentar el comercio automotriz entre los dos mayores productores de América Latina, afirmaron fuentes del sector.
Las empresas automotrices de ambas naciones prevén que los acuerdos existentes puedan extenderse a los vehículos pesados y camiones, según declararon dichas fuentes.
El presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil (ANFAVEA), Luiz Moan Yabuki, el mayor lobby automotriz del país, dijo tras un viaje a México la semana pasada que su organización mantuvo "reuniones muy positivas" con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
"La reunión en México fue muy bien. Estuvo presente la ANFAVEA, la AMIA y la argentina Adefa, Asociación de Fábricas de Automotores. Nosotros como sector privado defendemos el libre comercio", explicó.
De esta forma se refería a las negociaciones entre las partes todas del sector privado- para apremiar a sus respectivos países, con el objetivo de expandir tanto como sea posible el comercio de autos y autopartes, sobre todo entre México y Brasil, los dos mayores productores del continente latinoamericano.
A pedido de Brasil, el comercio entre los dos países está sujeto desde 2012 a cuotas de importación de vehículos y autopartes fabricados en México, al ser estos mucho más competitivos que sus homólogos brasileños.
El monto de las cuotas es de u$s 1.640 millones entre marzo de 2014 a marzo de 2015, y superadas las importaciones de automóviles o autopartes mexicanas por ese importe en ese período se aplica un impuesto del 30%.
Los acuerdos bilaterales firmados estipulan que el pacto va hasta marzo de 2015, y después teóricamente los dos países deben volver al libre comercio.













