La familia Macri vendió su participación en la concesionaria Autopistas del Sol, con el objetivo de evitar conflictos de intereses.

A través de SIDECO, el grupo Macri controlaba el 7% de Autopistas del Sol, la empresa concesionaria de los 120 kilómetros de la Panamericana, cuyo tramo con peaje -el 18% del total- está concentrado en el Acceso Norte, en la entrada a la ciudad de Buenos Aires.

Autopistas del Sol tiene como principal accionista al consorcio español Abertis (31,59%) y al italiano Impregilo (19,82%).

Ausol facturó 1.747,6 millones de dólares en 19 años de concesión y registró pérdidas por 89 millones de dólares.

Hasta el 2001, el grupo Macri poseía el 23% de la compañía, pero fue cediendo participación, para finalmente retirarse.